Choferes del Grupo Regional Independiente de Taxistas de Orizaba (GRITO) lograron recuperar la cantidad de 4 mil pesos que policías estatales le habían quitado a un ruletero, pues los uniformados argumentaron que debían pagar por daños generados en un choque.
El ruletero del taxi con número económico 122 de Orizaba chocó contra una camioneta en calles de la unidad habitacional Palmira de Mariano Escobedo. A ese municipio llegaron policías estatales adscritos al municipio de Río Blanco a bordo de la unidad PRB 002.
Los policías pidieron los 4 mil pesos, aunque el taxista estaba en el entendido de que, al tener la culpa, debía dialogar con el chofer de la camioneta para responsabilizarse de los daños ocasionados. Sin embargo, los policías de Río Blanco decidieron llevárselo detenido.
Al enterarse de que la policía había detenido al ruletero, sus compañeros se manifestaron afuera de la Policía de Río Blanco. En este sentido, el líder del grupo GRITO, Jairo Guarneros Sosa, dialogó con los elementos para externarles que estaban incurriendo en un abuso de autoridad, pues solo están facultados para infraccionar y solicitar alguna cantidad de reparación del daño de acuerdo al peritaje, los agentes de Tránsito del Estado, en este caso de Mariano Escobedo, no de Río Blanco.
Ante la presencia de los choferes, quienes protestaron con sus unidades, y debido a la exigencia y presión que ejercieron, los policías no tuvieron otra opción que devolver el dinero y su liberación.