Protestas y batallas judiciales libran en España los ciudadanos contra el ruido

Psicólogo Joaquín Rosas Garcés
Director de Alcalorpolitico

Estimado señor

Me permito escribirle en relación con varios mensajes publicados en la sección Vía correo electrónico, en los que algunos vecinos se quejan por las molestias ocasionadas por discotecas, bares, una escuela de danza y un festival que se celebró recientemente, así como con la columna en que el señor Carranco aboga por este tipo de establecimientos con el argumento de que promueven la cultura y pagan impuestos.

Según el Instituto Nacional de Estadística el ruido es el problema del que más se quejan los españoles y debido a eso han aparecido innumerables asociaciones, que han organizado protestas y entablado batallas judiciales, con resultados importantes.

Para limitarme a un ejemplo, el alcalde de Villarreal, una ciudad de la provincia de Castellón, ha sido condenado e inhabilitado por no atender las quejas relacionadas con el ruido de una fábrica.

Las asociaciones de lucha contra el ruido incluso se han agrupado y tiene sitios en la red –como ruidos.org – donde se publican estos casos.

Otro detalle que vale la pena mencionar es que en España la ley prohíbe que el ruido supere los 65 decibelios durante el día o los 45 por la noche, mientras que aquí el límite es de 68 decibeles de día y 65 de noche.

Le agradecería que publique esta carta para informar a los afectados, pero se reserve mi nombre.

Atentamente