Reanudan labores de limpieza en barranca del Infiernillo, en Maltrata

A dos meses de iniciar la limpieza de las represas retenedoras de sólidos y a 30 días de que inicie de manera oficial la temporada de lluvias, personal de PEMEX retomó el trabajo de limpieza de las represas en la barranca El Infiernillo, tras la descompostura de su maquinaria.

Lo anterior, luego que en los primeros días de darse el banderazo de inicio a las acciones de limpieza una de las máquinas de la petrolera se descompuso, lo que detuvo los trabajos.

Con ello, señalaron trabajadores materialistas, las acciones de desazolve que contemplaban 90 días de dragado se reducirán a 30, en lo que se espera no se tengan mayores riesgos por la crecida del río Chiquito, considerado uno de los cuatro de respuesta rápida en cada temporada de lluvias.



“Cada año se hace lo mismo, una parte lo cubre PEMEX y otra los Ayuntamientos de Mendoza y Nogales, para que las piedras y todo lo que arrastra la crecida del río no llegue a las colonias de sus municipios pero vemos que este año se va a trabajar menos”, explicó Manuel Martínez, adherido a la Confederación CROM.

En 2003, la crecida del afluente generó una barrancada en la parte alta de la montaña, arrastrando a su paso piedras, troncos de árbol y material areno gravoso. El impacto de los materiales en ductos y poliductos de PEMEX ocasionó el derrame de combustible y explosión, con saldo de 7 muertos, 12 quemados y afectaciones a terrenos de cultivo e infraestructura urbana en dos municipios.

Del año 2018 al 2021, los Ayuntamientos de Mendoza, Nogales y Huiloapan invirtieron en la limpieza de la represa, construida en 2005 para acumular el impacto de materiales pero este último año será el que menor cantidad de rocas se saquen debido a la descompostura de maquinaria de Pemex que este día retoma actividades.