Recibe presidente Calderón al Papa Benedicto XVI en el aeropuerto de León

El presidente Felipe Calderón dio la bienvenida al Papa Benedicto XVI.

"Bienvenido a México, Su Santidad. Es una gran alegría recibirlo en tierra mexicana", dijo y las porras se escucharon.

"Benedicto, Benedicto", gritó la gente. Gran alegría, dijo Calderón, "en momentos en que la patria atraviesa por situaciones difíciles", añadió.

"México ha sufrido la violencia descarnada del crimen. Pese a todo México está de pie, afirmó el mandatario. Está de pie porque el mexicano es un pueblo fuerte", reiteró.

Ante miles de personas que se congregaron en el aeropuerto de León, el mandatario dijo a Benedicto XVI que lo recibe un pueblo que ha sufrido mucho, pero hace esfuerzos para llevar alimento a las mesas de sus casas y sacar adelante a las familias.

"México se siente honrado por ser la primera nación de habla hispana que visita en el Continente", destacó Calderón.

Ante miles de fieles, políticos, ministros, gobernadores y miembros de la Iglesia Católica, el Presidente destacó que "al pueblo mexicano le regocija que haya aceptado la invitación, la cual le formulé durante mi visita de Estado al Vaticano".

Calderón expuso que la presencia de Su Santidad es importante para el país, pues atraviesa por momentos difíciles causados por la violencia y por fenómenos naturales como los sismos y la sequía.

"Su Santidad, lo recibe un pueblo que ha sufrido mucho por diversas razones y que a pesar de ello hace muchas cosas para sacar adelante a las familias", le dijo.

Le expuso que México atraviesa un momento difícil por la violencia despiadada y descarnada de los delincuentes, "el crimen organizado infringe sufrimiento a su pueblo, como nunca antes".

En los últimos años hemos sufrido sequías e inundaciones sin precedentes, además de epidemias y terremotos, pero a pesar de todo México está de pie, porque los mexicanos somos un pueblo fuerte.

A pesar de todo, le dijo el mandatario, en México encontrará a un pueblo amoroso y hospitalario.