El vocero de la Arquidiócesis de Xalapa, José Manuel Suazo Reyes, opinó que los actos de violencia registrados en Xalapa, Orizaba y Veracruz en las últimas horas, ponen en evidencia que la estrategia implementada por la Secretaría de Seguridad Pública no está funcionando.
“Esto muestra tres cosas; la descomposición social, la incapacidad de reaccionar de parte de las autoridades y tres (…), que las estrategias de seguridad no están resultando”, señaló.
Incluso, Suazo Reyes indicó que parece que las autoridades están siendo rebasadas por una ola de violencia que se está incrementando en los últimos días en la entidad.
Ante lo anterior se refirió al secuestro de Agustín Ureña Estrada, quien fue “levantado” en la iglesia de Santa Rita en el puerto de Veracruz antes del inicio de una misa de confirmación.
“Se levantó a una persona a plena luz del día, a la vista de todo mundo y eso causa terror y angustia, así como impotencia entre la gente ante estas expresiones tan violentas que me parece que nadie controla”, refirió el vocero en entrevista telefónica.
Insistió en cuestionar en dónde están los resultados que tanto se aplauden por parte de las autoridades, cuando ya es posible secuestrar a una persona del interior de un templo.
“Dónde están los avances que se presumen si no somos capaces de dar y ofrecer seguridad a la gente que está en un recinto sagrado”, cuestionó Suazo Reyes.
Agregó que hasta ahora los policías sólo sirven para acudir al lugar de los hechos y levantar los cuerpos, porque no han anunciado a ningún detenido.
“Después aparecen las patrullas, hacen ruido, levantan a los caídos, no se detiene a nadie y no hay cuentas de la autoridad para la sociedad, que reclama tranquilidad y paz, así como seguridad”, sostuvo.
Luego de que un comando armado atacó a personas en el antro “Madame” de Xalapa, el vocero de la Arquidiócesis dijo que esto es una muestra de la descomposición social que está afectando a todos los veracruzanos.
Criticó también los nulos resultados tras el enfrentamiento en un bar en Orizaba, en donde se habla de 2 abatidos, lo que demuestra que existe un repunte de hechos violentos.
Por último, consideró que no se debe de permitir enrarecer el proceso electoral, de ahí que lo primordial es que las autoridades bajen los índices de violencia y que se respeten todas las propuestas que le apuestan a la cultura de la vida.