Relata que en prestigioso restaurante xalapeño hicieron cargos ilegales en tarjeta

Buen día:

Esta es una historia para ser contada.

Resulta ser que el pasado día 9 mis colegas de trabajo y el que escribe fuimos al conocido restaurante La Casa de Mamá con la finalidad de celebrar el final del 2010. Por azares del destino fui yo quien estuvo a cargo de colectar los recursos de todos mis colegas, y pagar la cuenta, para lo cual decidí hacer uso de mi tarjeta de crédito.

Al serme presentada la cuenta cuál fue mi sorpresa al percatarme que se nos estaba cargando de manera inopinada un 15% por concepto de propina, cosa que ningún restaurante serio haría, al menos en México.

Según el Diccionario de la Real Academia Española de la Lengua, la propina está definida como (http://buscon.rae.es/draeI/SrvltGUIBusUsual?LEMA=propina&TIPO_HTML=2&FORMATO=ampliado):

Propina. (Del b. lat. propina).
1. f. Agasajo que sobre el precio convenido y como muestra de satisfacción se da por algún servicio.
2. f. Gratificación pequeña con que se recompensa un servicio eventual.
3. f. Colación o agasajo que se repartía entre los concurrentes a una junta, y que después se redujo a dinero.

De aquí que el concepto de propina, como bien lo vemos en esta definición, es un monto que el comensal otorga como muestra de reconocimiento, y hasta donde es de mi conocimiento no se puede considerar como algo obligatorio, sino más bien optativo, insisto, en función del nivel de satisfacción.

Ante tal situación manifesté mi inconformidad, a lo que me argumentaron que en grupos de más de 10 personas automáticamente se cargaba un 15% de propina, información que evidentemente no me fue proporcionada, ni verbalmente ni por escrito, al momento de hacer la reservación.

En vista de que el servicio había tenido carencias, mismas que no mencionaré, y de que no había yo recibido tal notificación por anticipado, decidimos que el monto de la propina fuera de 10%, mismo que pedí que no me lo cargaran en el voucher correspondiente, sino que lo dejaría en efectivo.

Ante mi inconformidad dos personas, cuyos nombres omitiré en este momento, vinieron a platicar conmigo para preguntarme si tenía yo alguna inconformidad con relación al servicio, haciendo ellos mismos hincapié, y dándome la razón, en el hecho de que efectivamente la propina es optativa.

Hasta ahí la historia no pasa a mayores, más allá de un breve momento de cierta forma desagradable, pero sin mayores consecuencias.

El problema realmente grave comienza el día de ayer, que decidí pagar la gasolina de mi vehículo haciendo uso de la misma tarjeta de crédito que usé para pagar la cuenta del mencionado restaurante. Al intentar hacer el cargo en la terminal de punto de venta de la gasolinera la transacción no fue autorizada por "Fondos Insuficientes", lo que llamó mucho la atención. Afortunadamente contaba con otro medio de pago y el contratiempo no pasó a mayores.

Esta mañana decidí llamar a mi banco para averiguar qué podría estar pasando con mi tarjeta de crédito, y después de un rato de averiguaciones, el operador que me atendió me indicó que había algunos "pagos en tránsito", y después de averiguar otro poco, resultó que todos ellos estaban a favor de La Casa de Mamá, según el siguiente detalle:

FECHA HORA MONTO
09/12/2010 23h33 $7,203.00
09/12/2010 23h35 $7,203.60
09/12/2010 23h35 $7,203.00

Evidentemente estos cargos aparecen aparte de aquel por el que efectivamente firmé el voucher correspondiente, lo que hace un total de cuatro cargos en espacio de algunos minutos, y que presenta el inconveniente de que sobrepasa el límite de crédito que mi banco decidió otorgarme. La consecuencia directa de esta situación es que mi tarjeta se encuentra bloqueada por sobregiro, al menos hasta que dichos "cargos" sean aclarados.

Interesante, ¿no?

Es una lástima que el personal de un supuestamente "prestigioso" restaurante lleve a cabo prácticas tan bajas, y que tienen como consecuencia una afectación directa para con el cliente. En fin, que en este México lindo y querido todo puede pasar, hasta en los restaurantes que de precian de ser "finos". Como comúnmente se dice "esto pasa hasta en las mejores familias", aunque ya estoy dudando que este restaurante pueda seguir siendo considerado como "de los mejores" de la familia gastronómica xalapeña.

Tristemente por el momento no puedo hacer mucho más, aparte de presentar mi reclamación en persona ante el restaurante, y evidentemente hacer del conocimiento de la comunidad de que tengan mucho cuidado si van a pagar con tarjeta de crédito en La Casa de (qué poca) Mamá, pues si tienen algún diferendo con el personal, les pueden atiborrar su instrumento crediticio con cargos fantasma, mismos que, al menos, les resultarán en contratiempos en lo que se aclaran las cosas.

La otra acción que llevaré a cabo es simplemente comentar de la manera más amplia mi triste experiencia con este restaurante con todos mis conocidos, y a menos que reciba una invitación de parte de algún tercero, yo no volveré de iniciativa propia a pisar ese sitio, al menos hasta que hayan cambiado de administración.

Bueno, pues feliz semana para todos.

Dr. Guillermo de Jesús Hoyos Rivera