Reliquias de Juan Pablo II, llegaron a México para unir a católicos y pedir por el país

El Padre Javier Onofre Valeriano, encargado de la pastoral litúrgica de la Diócesis de Orizaba, reconoció que la petición de que las reliquias de Juan Pablo II visitaran México, es con el propósito de que por medio de éstas, juntos los católicos hagan oración para pedir por la situación violenta que atraviesa el país.

“En este caso las reliquias de Juan Pablo II, fueron solicitadas por los obispos de México para que visitaran las diócesis, porque a los prelados les preocupa mucho la situación de México, que es un poco tensa por la violencia y más; y el papa Juan Pablo IIquien estuvo muy cercano a nuestro país, se convierte para nosotros en un motivo muy esperanzador para hacer oración a Dios”.

Recordó que un Beato y Santo son ejemplos de vida para la sociedad. En ambos casos, el cuerpo de este se convierte en una reliquia, es tener algo material del personaje y que en la fa católica se convierte en un acontecimiento significativo para la iglesia “al paso del tiempo las reliquias son muy importantes, al grado de tener lugares específicos para su veneración”.

Describió que las reliquias se clasifican en tres: el primer grado es aquello que formó parte de su cuerpo, como puede ser corazón, un hueso, pero en este caso es la ampolleta que contiene sangre del beato, que en su momento se le extrajo cuando estaba en el hospital “su secretario particular quiso conservarla”.

En segundo grado todo lo que ocupó, portó, incluso tocó. Aquí entran los artículos como el crucifijo, el escritorio donde estudiaba y, tercer grado aquello que toca lo primero o segundo y citó como ejemplo si se tiene una estampa y se pega alguna de las reliquias antes mencionadas se convierte ya en una reliquia más.