Remodelación del Hospital de Poza Rica facilitó robo de bebé, admitió Pablo Anaya

La modificación de la estructura del sistema de seguridad del Hospital Regional de Poza Rica a causa de los trabajos de remodelación en el área de urgencia, fueron uno de los factores que provocó la sustracción de un recién nacido.

Mientras que el incumplimiento al protocolo administrativo por parte de un médico residente becado provocó que en el Hospital de Alta Especialidad de Veracruz se entregara un feto en un frasco, aceptó Pablo Anaya Rivera, secretario de Salud.

Durante su comparecencia y en la fase de preguntas y respuestas, explicó que en Poza Rica, el Hospital Regional presenta obras de remodelación en el servicio de urgencias, por lo que fue necesario modificar el sistema de vigilancia y seguridad.

En ese nosocomio hay más de 100 camas y diariamente acuden cerca de 5 mil personas y se atienden cerca de 8 partos diarios.

Pero ahí falló el programa denominado “Familiar Acompañante”, el cual determina que cualquier mujer que dé a luz se le debe entregar de inmediato al bebé para el inicio de la lactancia, pero la paciente debe estar acompañada por un familiar del sexo femenino.

Pero en este caso en particular, la madre siempre estuvo sola y lo que tuvo que haber procedido era retirarle al niño por la noche y llevarlo al área de cuneros, “pero no se dio eso”.

Otro factor es que sólo se tienen dos enfermeras para atender de entre 20 a 25 personas.

“Y por las con condiciones de la obra, a lo mejor no se tenía seguridad y fue fácil sustraer al niño. Afortunadamente el menor se recuperó y eso nos sirvió para reforzar las medidas de seguridad en todos y cada uno de los hospitales; se ha reforzado la seguridad en cada una de las puertas”.

Incluso, ahora para ingresar a un hospital es necesario entregar la credencial de elector y decir a quién se va a visitar; al terminar la visita se devuelve la mica.

“Podemos decir que esto fue un hecho lamentable que nos permitió reforzar (…) yo espero en Dios, así lo espero porque nadie está exento de nada, que no vuelva a ocurrir un hecho lamentable como esto”.

En el caso del Hospital de Alta Especialidad de Veracruz, en donde se entregó a una familia un feto de 800 gramos en un recipiente de plástico, dijo que el responsable fue un médico residente que depende de la Comisión Nacional de Becas.

A los médicos residentes se les explica que la norma establece que en caso de feto de menos de 500 gramos se debe informar a los familiares y si de parte del área médica hay interés de estudio y si el familiar autoriza, se conserva en un recipiente y se envía al Departamento de Anatomía Patológica; de no ser así se pide autorización para su incineración.

La segunda condición es para fetos mayores de 500 gramos en donde se debe elaborar un certificado de defunción de óbito, depositarlo en el área de anfiteatro y notificar a la familia para su sepultura .

“Aquí, la atenuante según el residente, es que el papá no tenía dinero para enterrarlo y por eso se lo dio en un recipiente de plástico”.

Por lo que dijo que este “acto insensible” no depende de la Secretaría de Salud, se notificó al Comité Nacional de Becas para que resuelva, aunado a ello, se interpuso una denuncia ante el Ministerio Público para deslindar responsabilidades.

También dijo que este caso permitió de nueva cuenta capacitar a los médicos sobre los protocolos administrativos.

Asimismo, dijo que para quienes no utilizan el diccionario, la palabra promiscuidad suena fuerte, pero explicó que sus declaraciones se mal interpretaron porque nunca quiso decir que la promiscuidad es la causa de cáncer cervicouterino.

A lo que se refirió fue que la promiscuidad pudiera ser factor de riesgo para enfermedades de transmisión sexual y de cáncer cervicouterino.