Reporta a dueños y albañiles de construcción en Loma de Oro que afectan a los vecinos

Estimado psicólogo Joaquín Rosas Garcés.
Director General de Al calor político:

La razón por la que le escribo es más por catarsis que esperando que mejoren las cosas.

En el domicilio donde habito en Loma de Oro (Ánimas) existen partes sin pavimentar lo cual no me causa ningún problema. Hay varios lotes baldíos y se están haciendo muchas construcciones. Desafortunadamente frente a donde vivo habían dos lotes (entre otros) en los que no habían levantado ningún tipo de construcción. Es aquí donde actualmente están construyendo cuatro casas donde debieron construirse dos normales. La razón que nos dio uno de los propietarios (son hermanos), cuando platicó con nosotros, mencionó que era mejor hacer un edificio que hacer tres casas (no cuatro).

En esta calle nosotros hemos echado camionadas de piedra caliza para arreglar la calle y una máquina retroexcavadora cuando iniciaron sus trabajos arruinó la calle y dejaron un batidero de lodo que ni les importó. Nosotros cuando construimos nuestra casa siempre estaban los inspectores al pendiente y a cada rato nos querían parar la obra por cualquier detallito y como esperando compensación económica lo cual nunca hicimos.

Alrededor de los dos terrenos que ocupan el lado de una cuadra los trabajadores laboran en la calle y se han extendido en un perímetro considerable y tienen arena y grava al lado de su construcción. Así como dejan regados alambre, clavos, maderas, escaleras, tambos, mangueras, herramientas, etcétera, hasta cortan piso enfrente de nuestro domicilio y siempre sacuden su polvo y su basura fuera de la construcción para que no se les ensucie de más. Mi auto ya ha pegado en las partes de la calle que no están parejas porque los albañiles hacen la mezcla en la calle y tiene uno que pasar por donde nos dejan espacio (nos retan parándose enfrente). También estacionan cualquier tipo de vehículo que traigan (más de uno) exactamente donde estorban más. Por lo mismo que ocupan bastante espacio, las personas que pasan caminado se bajan de la banqueta y hay veces que es imposible pasar en auto y tenemos que dejarlo siempre en la cochera porque hasta se sientan en la banqueta del frente de nuestra casa. Lo que es peor hasta se molestan cuando uno tiene que hacer uso de la calle.

Para rematar con los calores se desprenden muchos malos olores, ya que tiran sobrantes de comida por donde caiga y también hacen sus necesidades fisiológicas en los terrenos aledaños (yo he observado que otros lugares les ponen sanitarios portátiles). Aún cuando se le ha llamado muchas veces a uno de los propietarios y es muy amable; pues no está siempre al pendiente de sus trabajadores y como es de suponerse ellos hacen lo que quieren. La verdad yo ya no sé ni a qué santo rezarle para que los señores que están construyendo agarren la onda.

Lo único que quisiéramos es mostraran una pizquita de prudencia. Finalmente, es un problema que sólo nos afecta a nosotros porque los dueños van a vender (espero que no arrenden sus varias casas) y los albañiles se irán a otro lado; pero los entripados, los trancazos al coche nadie nos los va a reponer. He tomado varias fotografías, en caso de ser necesario se las puedo enviar. Le pido por favor omitir mis datos y que si existe alguien que pudiera orientarme qué hacer en estos casos (aparte de tomarse un té de tila) se lo agradecería mucho. Sin más me despido cordialmente de usted y lo felicito por su excelente periódico.

(Nombre)
(Dirección)

Xalapa, Ver.