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Sección: Estado de Veracruz

Siete iglesias de la Diócesis de Orizaba han sido robadas en los últimos dos años

- El pastor Marcos Palacios lamenta que los ladrones piensen que las alcancías de los templos están llenas de dinero

- Han tenido que implementar mecanismos de seguridad con costos muy altos

Miryam Rodr?guez Hern?ndez Orizaba, Ver. 11/04/2013

alcalorpolitico.com

En los últimos dos años amantes de lo ajeno han robado en siete iglesias pertenecientes a la Diócesis de Orizaba, indicó el encargado de la pastoral de medios de comunicación, Marcos Palacios Cárdenas, razón por la cual se ha tenido que buscar colocar algún mecanismo de seguridad en algunos templos.

Estos robos se han presentado en: la capilla “Señora de Lourdes” que pertenece a la parroquia de San José de Gracia; Santa Gertrudis; la Catedral San Miguel de Arcángel en donde hurtaron el copón pensando que era de metal precioso y dejaron las formas consagradas; la iglesia de Santa Ana.

La capilla de adoración perpetua Monte Carmelo, en esta se cometió el robo más grande porque se llevaron el Santísimo y la Hostia Consagrada; así como también en la capilla del Sagrado Corazón y recientemente en la iglesia Santa María de Guadalupe del municipio de La Perla.



Indicó Palacios Cárdenas que es probable que la gente piense que las alcancías están llenas de dinero, sin embargo no es así ya que la gente deja en éstas montos pequeños, porque lo obtienen de lo poco que poseen.

“En años pasados la gente se desvivía por tener custodias, cáliz que eran de materiales preciosos, pero ya no es así, ahora son de latón con un baño de chapa de oro, pero al rasparlo queda sólo el metal”, afirmó.

A pesar, dijo, de no ser la solución, en algunas iglesias se han colocado sistemas de vigilancia, pero son pocas; entre estas: la Catedral, La Concordia, El Carmen, Monte Carmelo, Capilla de Adoración Perpetua de San Francisco de Asís, las iglesias de la cabecera de Nogales y Ciudad Mendoza.



Reconoció que estos equipos de seguridad son muy caros, no lo puede pagar la iglesia y ejemplificó que en el caso de la capilla de adoración “Monte Carmelo” una institución quiso ayudar y donó éste, cuyo costo asciende a 180 mil pesos.

Antes de concluir destacó el mayor problema es la pérdida del respeto al sitio sagrado donde el hombre se encuentra con Dios.