Sindicato de Trabajadores Normalistas se pronuncia en contra de las directrices del INEE

La mañana de este viernes, durante conferencia de prensa, el Sindicato de Trabajadores Normalistas y de la Educación de Veracruz se pronunció en contra de las cuatro directrices para mejorar la formación inicial de los docentes de educación básica que publicó el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación en México (INEE).

Para lo anterior, el Sindicato dio a conocer que formó una Comisión de trabajo para brindar un posicionamiento y una opinión ante estas directrices.

El secretario general del STNEV, Marco Aurelio Martínez Sánchez, afirmó que habrá una reforma en la educación normal "que tiene matices muy semejantes, que tiene características muy peculiares" y ante ello muestran su preocupación.



Por su parte, la Comisión para analizar las directrices redactó un documento dónde se analiza y critica la reforma laboral disfrazada de reforma educativa y en ese documento es donde expresan su preocupación.

Lo anterior es porque "es un error desestimar la historia de las escuelas normales como formadoras de especialistas para atender a los niños y jóvenes de educación básica”, ya que las normales son las que forman a dichos especialistas, para que tengan la capacidad para la formación educativa inicial.

Reiteraron que están en contra de la homologación de todas las escuelas normales con las universidades porque es perder la trayectoria pedagógica, filosófica e histórica de estas escuelas, ya que tiene un impacto pedagógico y social.



"El documento (del INEE) acepta que son los estudiantes normalistas de escuelas públicas, quienes están mejor evaluados en los exámenes, si los normalistas egresados de escuelas públicas son quienes salen mejor evaluados ¿por qué tienen que cambiar ese modelo?, ¿no tendrían qué fortalecerlo?", aseguró Víctor Manuel Domínguez, integrante de la Comisión.
Lo anterior lo califican como parte de una serie de inconsistencias que tiene el documento aprobado por el INEE para el mejoramiento de la formación inicial de los normalistas, según la Comisión de trabajo.

Criticaron que el documento centre los resultados educativos en un sólo actor, que en este caso es el maestro, sin tener en cuenta los bajos presupuestos que el Gobierno Federal destina a la infraestructura educativa en las zonas rurales, teniendo en cuenta que existen más escuelas rurales que urbanas y acusaron que esas medidas sólo tienen un "trasfondo político para no hacer legítima la función del docente".

Por su parte, Olga María Espino dejó en claro que "los académicos de las escuelas normales estamos a favor de mejorar nuestro trabajo como instituciones formadoras de docentes de educación básica".



Reconoció también que están a favor de la evaluación pero piden que esa evaluación parta de un diagnóstico serio y congruente con la naturaleza de su trabajo, para que a partir de eso se pueda diseñar un sistema educativo que esté acorde con las necesidades de todos los docentes.

Aseveraron que el INEE también reconoció la falta de información puntual de las instancias educativas y aun así el documento apunta a directrices que calificaron de tendenciosas, mismas que atentan contra la educación y que abren las puertas a instituciones que no tienen evidencia de resultados favorables en formación académica.

También denunciaron la falta de conocimiento de la historia de las escuelas normales en el país, afirmando que existe un desfase por parte de las autoridades al momento de crear estas directrices.