Tras la detención de Javier Duarte, el dirigente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Renato Alarcón Guevara, se pronunció por un nuevo comienzo en Veracruz, "sin dejar de reconocer el daño y dolor causado por las personas que han traicionado la confianza que implica el alto honor de gobernar".
Reconocío que la actuación del Gobierno federal, "ha sido la correcta contra la corrupción y la impunidad en ésta y en las últimas que se han ejecutado, sin la afiliación política de acusados", manifestó.
"Los priístas veracruzanos, así como toda la sociedad, agraviados por el exgobernador, reiteramos nuestro compromiso con la honestidad y transparencia como premisas de cualquier servidor", acotó.
En torno al respeto y reconocimiento que expresa el fiscal Jorge Winckler al gobernador Miguel Ángel Yunes, expresó que, se supone que la Fiscalía General del Estado (FGE), está dotada de autonomía.
"El PRI no es Tribunal, el gobernador no es policía pero si él (Winckler)", manifestó.
Dijo que cualquier ejecutivo tiene facultades, pero en ningún sentido un gobernador es fiscal, "tenemos que promover el Estado de Derecho y no tergiversar las acciones", acotó.