Una sociedad alejada de libros e idiomas es una sociedad sorda, ciega y muda: Pitol

El libro y los idiomas que alberga son un camino de salvación, una sociedad alejada de ellos es una sociedad sorda, ciega y muda, expresó el premio Cervantes, Sergio Pitol.

Leer, acercarse a las agitaciones que la lengua produce en el tiempo, es uno de los mayores placeres, uno de los grandes dones que nos ha permitido el mundo, no sólo como distracción, sino también como una permanente construcción y rectificación de nosotros mismos, abundó.

Fue en su ponencia “Elogio del lenguaje: historia de una pasión” como parte del III Encuentro Regional de la Academia Mexicana de Lenguas, que invitó, casi exhortó, a mantenerse en los libros, gozar el placer del texto, acumular enseñanzas, trazar una red combinatoria quedé unidad a nuestras emociones y conocimientos.

“En fin, el libro y los idiomas que alberga son un camino de salvación. Una sociedad alejada de ellos es una sociedad sorda, ciega y muda”, destacó.

Dijo que los humanos hemos recibido la palabra como una herencia mágica. Uno sabe quién es solamente por la palabra. La palabra, tanto la oral como la escrita, es el conducto que nos comunica con los demás. Le permite salir a uno de sí mismo y participar en el convivio social.

Definió que la literatura, como toda rama de la cultura, no conoce límites; su territorio es inconmensurable, y a pesar de todos los esfuerzos que se haga no se podrá conocer más que una porción minúscula de aquel inmenso espacio.

“En la zona donde yo me muevo mejor, la novela, el lector tiene la posibilidad de viajar por el espacio y también por el tiempo y conocer el mundo y a sus moradores por su presencia física tanto como en su interioridad espiritual y psicológica".