UPAV, obligada a transparentar uso y manejo de recursos

Luego de que la Universidad Popular Autónoma de Veracruz (UPAV) se viera envuelta en una serie de irregularidades que llevaron al Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) a presentar una denuncia en contra de los integrantes del Patronato “Alianza para el Aprendizaje” y en contra de exservidores públicos por un daño patrimonial de 361 millones 344 mil 763.92 pesos, en esa institución educativa ya es una obligación transparentar el uso y manejo de sus recursos.

Por lo que a partir de hoy, la Junta de Gobierno de la UPAV tiene 60 días para hacer las adecuaciones a su normativa interna a fin de dar cumplimiento a las reformas y adiciones que entran en vigor.

Las reformas y adiciones que cobran vigencia señalan que todo convenio que la Universidad celebre con cualquier persona física o moral y que en el cumplimiento de su objeto se modifique el patrimonio de la Institución, deberá ser enterado por el Rector dentro de los informes trimestrales que formulará y someterá a la aprobación de la Junta de Gobierno.



Además, ahora la Junta de Gobierno tendrá la atribución de aprobar los informes trimestrales de gestión financiera que se presenten al Congreso del Estado, los cuales deberán precisar el estado actual del patrimonio de la Universidad, así como las modificaciones que éste haya sufrido derivado de la celebración de convenios con personas físicas o morales.

Mientras que el Rector tendrá la atribución de formular y someter a la aprobación de la Junta de Gobierno, los proyectos anuales de presupuesto de ingresos y de egresos, el programa operativo anual de adquisiciones, arrendamientos y servicios y los informes trimestrales de gestión financiera que se presenten al Congreso del Estado, los cuales deberán precisar el estado actual del patrimonio de la Universidad, así como las modificaciones que éste haya sufrido derivado de la celebración de convenios con personas físicas o morales.

La reforma que entra en vigor, se sustentó con el argumento de que el prestigio que la UPAV venía ganando ante la calidad de sus servicios; sin embargo, se vio mermado luego de permanecer envuelta en una serie de irregularidades como las plasmadas en quejas presentadas por diversos egresados de dicha institución, quienes luego de haber concluido sus estudios y cubrir, con mucho sacrificio, los costos correspondientes para realizar los trámites de expedición de sus títulos y cédulas profesionales de licenciatura y maestría, no tenían respuestas ni soluciones; además por la integración del Patronato “Alianza para el Aprendizaje”, que malversó los recursos de la institución.