Ante el cierre de los ingenios Independencia, la Concha, San Gabriel y Nuevo San Francisco, el secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Industria Azucarera de la República Mexicana (STIARM), Adrián Sánchez Vargas, urgió a la Federación y estado a apoyar para que se rescaten dichas factorías, al prever un panorama difícil para la industria que “pegará” también al sector obrero.
Lamentó que en la industria azucarera se haya convertido en algo “típico” el tema de los cierres de las factorías derivado de la misma crisis del sector, pese a que el país es propicio para la producción de azúcar.
Tras inaugurar la jornada de salud en Potrero Nuevo, el dirigente nacional lamentó que continúen cerrados los ingenios, aun cuando existen los elementos para que vuelvan a funcionar, “están los inversionistas que quieren a pesar de la crisis rescatar los ingenios, hemos platicado con ellos, pero nunca falta algo por ahí que se atraviese” expresó.
Destacó que en el caso del tema del nuevo San Francisco, por ley los trabajadores son los primeros en derecho en caso de que se certifique la quiebra de la factoría, sin embargo, están buscando llegar a acuerdos y trayendo inversiones para que no se cierre de forma definitiva la fuente de trabajo, pues esto tendría un impacto importante para el sector.
“Para eso es muy importante el apoyo que nos brinda el gobierno federal que también ya lo hemos solicitado pero particularmente al gobierno del estado, para seguir conservando algo que es tan preciado como la paz laboral” expresó el entrevistado.
Subrayó que si bien México es un lugar propicio para la producción de azúcar, se requiere que se trabaje en una industria integrada, donde se impulse la cogeneración y la producción de combustibles, para que deje de ser una industria productiva sólo durante unos meses, y tenga con que alimentarse los
meses del año.
Por ello, pugno porque a través de la cogeneración y biocombustibles se busque mantener y equilibrar los precios del endulzante, y esto se traduzca en un beneficio no sólo para los productores de caña, sino también para los obreros que tengan el empleo garantizado los meses del año.