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Sección: Estado de Veracruz

Brigadistas, agotados

Urgen ayuda en Pico de Orizaba, no cede incendio; claman auxilio a Puebla

- Cumple una semana siniestro en zona de Calcahualco; ya afectó 600 hectáreas

- Brigadistas están cansados y enfrentan contrariedades en zonas alejadas

- Requieren ayuda de personal preparado; población puede apoyar con insumos y dinero

Tania Guzmán Orizaba, Ver. 16/03/2021

alcalorpolitico.com


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El coordinador del proyecto “Salvemos al Pico de Orizaba”, Ricardo Rodríguez Deméneghi, consideró urgente la participación de brigadistas de Puebla para apoyar en las labores de sofocación del incendio en el Parque Nacional Pico de Orizaba por la zona de Calcahualco, ya que hasta la noche de este lunes había cinco puntos activos sobre la Cuenca del Jamapa.

Indicó que se tiene un estimado de 600 hectáreas afectadas en el lugar por el fuego, sin embargo, se ha visto con anterioridad que las autoridades minimizan los eventos que se han registrado en esa zona.

Indicó que a una semana de estar combatiendo el fuego, los brigadistas de las comunidades están agotados y ayer mismo subió la brigada de la Comisión Nacional Forestal (CONAFOR) pero se les ponchó una llanta y se quedaron a 80 kilómetros de la vulcanizadora más cercana.

Aclaró que se pide el apoyo de las brigadas de Puebla porque son numerosas y su gente está calificada.

Descartó que se pueda echar mano de ciudadanos voluntarios como se ha llamado en las redes sociales, pues el combate de incendios forestales requiere de preparación, además de que en el caso del Parque Nacional hay que estar trabajando a 3 mil 400 y 3 mil 800 metros de altura.

En lo que sí puede ayudar la población, dijo, es con alimentos e hidratación para los combatientes, e incluso con aportaciones económicas para comprar combustible para los vehículos e insumos que hacen falta, así como para que los brigadistas no se preocupen por la parte de tener algo para el sustento de sus casas, pues están pasando todo el día intentando sofocar el fuego y dejando a un lado sus labores cotidianas para cuidar “la fábrica de agua” más importante del Estado.