Vecinos de Sipeh Ánimas acusan al Director del IPE de intimidación

A 73 días de que concluya el gobierno de Miguel Ángel Yunes Linares, el director del Instituto de Pensiones del Estado (IPE), Hilario Barcelata Chávez, ha emprendido una campaña de intimidación y amenazas contra los vecinos del fraccionamiento Sipeh Ánimas, construido durante la administración de Dante Delgado y luego abandonado 26 años por las autoridades de ese organismo público descentralizado, a un paso de la quiebra total en perjuicio de miles de pensionados y jubilados que prestaron durante años sus servicios en dependencias del Gobierno del Estado, amenazándolos con acciones judiciales si no entregan áreas verdes que durante casi tres décadas no recibieron ninguna atención oficial.

Barcelata Chávez, feroz crítico de lo que otros directores del IPE hicieron, según él, con el patrimonio de los trabajadores, saqueando indiscriminadamente el fondo de pensiones hasta alcanzar una suma superior a los cinco mil millones de pesos y al no haber dinero para liquidar a sus cercanos colaboradores y grupo de “edecanes”, “asistentes” y “asesores”, ahora busca vender a como dé lugar espacios verdes en calles y privadas de Sipeh Ánimas, para crear ahí una zona comercial o bien lotificar para construir más casas; pisoteando el objetivo inicial de crear una unidad habitacional para trabajadores al servicio de dependencias oficiales, muchos de ellos aún deben fuertes sumas de dinero por sus casas.

Barcelata Chávez, usando como escudo un membrete bautizado por él como “Observatorio de las Finanzas Públicas”, supuestamente avalado por la Universidad Veracruzana (UV), de la que es o fue catedrático hasta antes de ser favorecido con la Dirección del Instituto de Pensiones (versiones dignas de crédito afirman que su objetivo era ser Secretario o Subsecretario de Finanzas y Planeación en el Gobierno yunista) presentó durante la campaña política de Yunes Linares escenarios catastróficos sobre los recursos propiedad del IPE; señalando que era urgente la venta de los hoteles que aún le quedan, Xalapa y Chachalacas, lo que fueron los cines Carmela Rey y Claudio Estrada, también en la capital del Estado y un cementerio en Coatzacoalcos y otros predios en diversas partes de la entidad, para obtener recursos que supuestamente irían a dar a la Reserva Técnica para continuar pagando las pensiones y otras prestaciones, como los préstamos a corto plazo y seguro social.



Pero nada de ello ha ocurrido, al parecer por la resistencia de los integrantes del Consejo Directivo del Instituto, integrado por representantes de sindicatos como SNTE, SETSE y FESAPAUV, principalmente, amén de otros organismos más modestos en representatividad.

A cambio de ello, al parecer esos sindicatos no opusieron resistencia a “rescatar” las áreas verdes de Sipeh Ánimas, que durante años han sido cuidadas, limpiadas y chapeadas con recursos surgidos de los propios vecinos que así han evitado que algunas zonas se convirtieran en muladares y basureros públicos.

En 26 años, ninguna autoridad de Pensiones se preocupó por atender esos espacios, así como tampoco le interesó municipalizar ante el Ayuntamiento capitalino servicios como la recolección de basura, pavimentación o mantenimiento de calles, alumbrado público y agua potable, servicios que si bien se prestan es por la presión ejercida por comités vecinales y como “un favor”.



El actual Ayuntamiento, presidido por Pedro Hipólito Rodríguez Herrero, ha hecho oídos sordos a la petición de los vecinos de municipalizar formalmente esos servicios y a cambio, dicen los mismos habitantes de la zona, estaría apoyando al IPE a apoderarse de pequeños espacios verdes que, se insiste, si no hubiera sido por la atención de los mismos vecinos, estarían convertidos en vertederos de toda clase de desechos.

Como parte de la intimidación, el IPE envió a presuntos abogados a decirle a los vecinos que debían regresar esos espacios o podrían enfrentar acciones legales por presunto “robo” de espacios y ante la resistencia de algunos a aceptar incondicionalmente que no hubiera reclamos por ello, de la noche a la mañana trabajadores de una empresa particular han llegado a cercar espacios e incluso han quitado árboles y plantas sembradas por los inquilinos para hacer más agradable el lugar.

Algunos vecinos plantearon una venta simbólica de esos espacios, pero algunos “abogados” representantes de Barcelata Chávez les advirtieron que “ni se les ocurra tal planteamiento”, porque el presunto valor de esos espacios es “comercial” y algunos ya están “negociados”.



El rumbo de Sipeh Animas, Indeco Ánimas y otros lugares cercanos se ha convertido en botín de administraciones municipales y estatales de por lo menos una década atrás. En Indeco Ánimas, una prima del exgobernador Javier Duarte de Ochoa construyó un edificio de cinco pisos de alto pisoteando el reglamento vigente de años de que en esa zona no podían edificarse ese tipo de estructuras por ser zona residencial. Para ello, contó con la complacencia del exalcalde Américo Zúñiga Martínez, de quien se sabe un familiar muy cercano adquirió con muchas ventajas terrenos en la misma zona y en tiempo récord sus calles fueron pavimentadas con concreto hidráulico, dotadas de drenaje y alcantarillado y red de agua potable, para lotificarlas y construir residencias.

A un costado de la colonia Sahop, Zúñiga Martínez también autorizó la construcción de dos edificios de cinco pisos o más y en Las Barricas se construyen casas afectando parte del área verde de la calle Obras Urbanas, de la misma colonia Sahop y parte del área verde de Sipeh Ánimas.

Los vecinos de Sipeh Ánimas esperan que el próximo Gobierno estatal, que encabezará Cuitláhuac García Jiménez, de MORENA, designe a un director del IPE sensible a las peticiones de los vecinos de esa zona y por lo menos los convoque a una consulta, pero advierten que los enviados de Hilario Barcelata Chávez les han comentado “que es inminente” el inicio de obras para construir “espacios comerciales” y “posiblemente más casas” en los “espacios rescatados”… (RTJ).



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