Desaparición de Juntas de Conciliación traería más trabajo para el PJE

El magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) y del Consejo de la Judicatura, Alberto Sosa Hernández, admitió que la desaparición de las Juntas de Conciliación y Arbitraje representaría mayor trabajo para el Poder Judicial del Estado (PJE).

De la propuesta que planteó el presidente de la República, Enrique Peña Nieto, la semana pasada, dijo, que hay que esperar primero que prospere en el Congreso de la Unión.

En tanto, se debe esperar a que esto se lleve en todos sus ámbitos, "para saber si se da o no se da, si es aprobado o no, pero implicaría un poco más de trabajo para el Poder Judicial", manifestó tras la entrega del galardón por los 50 años de servicio en el PJE a la magistrada Sara Hilda Beltrán Ramos.



Con relación a la puesta en marcha del nuevo Sistema de Justicia Penal Acusatorio y Adversarial, Alberto Sosa reconoció que si bien las salas de juicios orales en todo el Estado, están operando con lo mínimo necesario, no es posible que cuenten con todos los requisitos que marca la Secretaría Técnica del Consejo de Coordinación para la Implementación del Sistema de Justicia Penal (SETEC), porque en algunos distritos judiciales, los Centros de Reinserción Social (CeReSos) no están junto a éstas.

A pesar de las carencias "podemos estar funcionando con decoro, con dignidad y prestando el servicio a los justiciables, estaremos allí puntualmente y antes de que entre el término que se dio legalmente en el 2008", mencionó.

Por ello reiteró que todos los actores involucrados en el funcionamiento del nuevo sistema de justicia, deben desempeñar el papel que les corresponde.



En el caso de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), que tenga los policías debidamente certificados o capacitados para ello; la Fiscalía General del Estado (FGE) que haga una buena investigación, que la Defensoría Pública que haga una buena defensa y que los jueces den un buen resultado en las distintas resoluciones que se van dando en las distintas etapas del proceso, acotó el Magistrado.

Descartó que haya eslabones débiles que dificulten la nueva forma de aplicar justicia, sino que, por el contrario lo que existe es coordinación con todos los actores para que indudablemente los ciudadanos acepten, de acuerdo a la investigación y las consideraciones de los juzgadores, los fallos que se emitan en un juicio.