Enumera deficiencias en que habían incurrido secretarios del SIDEPEV

Director de “Al calor político”

El famoso periodista A Puente Rosado, que en paz descanse, en forma constante repetía “Peléense las comadres y salgan las verdades”.

El suscrito, con la calidad exsocio del Sindicato Democrático de Empleados del Poder Ejecutivo de Veracruz (SIDEPEV), hoy disfrutando de mi jubilación, me permito manifestar lo siguiente:

El día 29 de los corrientes, en la sección “Vía correo electrónico”, leí un comunicado firmado por el secretario general mi amigo por cierto, del SIDEPEV, VÍCTOR NOVAS HERNÁNDEZ en el que, palabras más, palabras menos, da a conocer que fueron suspendidos de sus cargos MARGARITA CARMONA CORTÉS, JESÚS VÁSQUEZ ORTÍZ Y SILVIA ELIZABETH RAMÍREZ DÍAZ, secretarios de Trabajos y Conflictos, Acción Cultural y Previsión Social, respectivamente.

No puedo ocultar que a muchos trabajadores en activo y jubilados nos causó una gran alegría dicha publicación ya que, si yo me salí de la mencionada organización fue precisamente por las constantes violaciones a los estatutos que realizaba MARGARITA CARMONA cuando fue secretaria general de ese sindicato, con la complacencia y complicidad de VÍCTOR DÁVILA

Por ejemplo ,entre las violaciones está NEGAR VOZ a los socios de esa organización en las asambleas; la falta de rendición de cuentas mensuales (en complicidad con el entonces secretario de Finanzas de esa organización, un tal Rubén Morales de Hacienda del Estado, a quien sólo lo utilizó porque ni siquiera le daba a firmar los cheques bancarios de la cuenta mancomunada que tenían); El de NO CONVOCAR A ELECCIONES en el año 2010 y pretender reelegirse en el cargo, cosa que internamente hizo, aunque afortunadamente el Tribunal Estatal de Conciliación y Arbitraje no se lo permitió, aduciendo que ello violaría los estatutos; por lo que “para su manejo” puso en el cargo a mi amigo Víctor Novas Hernández.

Debo mencionar también que dentro de otras inconformidades que me hicieron salirme del sindicato se encuentran PRIVAR A MUCHOS TRABAJADORES DE LOS VALES DE DESPENSA que les correspondían, los cuales le entregaba el gobierno del estado para que se los hiciera llegar (eso motivó que actualmente el gobernador decidiera que esos vales sean entregados vía nómina, ¡mucho por él!)

Además RECATEGORIZABA únicamente a sus incondicionales, entre ellos al mencionado JESÚS VÁSQUEZ ORTIZ, privando de ese derecho a los trabajadores que tenían mayor antigüedad.

Se comentaba incluso que compró un automóvil usado a un precio elevado con el dinero de nuestras cuotas, el cual solo sirvió para sus lecciones de manejo y para estar en un taller propiedad de un hermano de ella. También, con el dinero de las cuotas sindicales, compró otro automóvil, pero ahora nuevo, mismo que puso a su nombre y no del sindicato.

También se decía que estuvo solicitando préstamos, según que para nuestra organización, a un usurero que resultó ser, según ella, su marido, pagando desde luego altos intereses en perjuicio de nuestras cuotas.

En las celebraciones del día del empleado ella lo celebraba como día de su familia y no el del empleado, pues llevaba hasta el cotorro a la cena.

Pero principalmente en las asambleas generales, con la complacencia de sus seguidores, siempre se negó a dar contestación a los cuestionamientos que se le hacían acerca de esos señalamientos.

Finalmente, les pido una disculpa a mis compañeros, pues por culpa de esta nefasta líder no les tocó disfrutar mi categoría, dado que me vi en la necesidad de darme de baja del sindicato porque no me quiso ayudar en mi jubilación, diciéndome que “el sindicato me debía mucho pero con la actitud tomada en la asamblea, no te debe nada” (en dicha reunión les decía a mis compañeros que el informe financiero lo debería de dar la Secretaría de Finanzas y no ella, puesto que es la secretaria general, pero como nunca dejó a su comité trabajar, era ella la todóloga, por cierto, con absoluto desconocimiento y total ignorancia, hizo que nos dividiéramos).

Señor director, el motivo del presente es:

PRIMERO: Felicitar a mi amigo Víctor Novas Hernández por el valor demostrado al haberse atrevido a echar de la directiva de ese sindicato a tan nefasta persona; sugerirle que se asesore adecuadamente, puesto que los motivos que esgrime en dicha publicación, a mi criterio, no son suficientes para fincarle responsabilidad a los expulsados.

Además, para señalarle que, si bien es cierto que el paso que ha dado merece mucho reconocimiento, más cierto es que también te exige una gran responsabilidad, pues lo obliga a que de ahora en adelante su actuación sea más transparente hacia el gremio que dirige, ya que como amigo de Margarita que fue, puede ser que su reputación no está muy bien que digamos, aunque sé que este gran amigo es de convicciones propias y profesionales.

SEGUNDO: Para sugerirle a los compañeros del SIDEPEV que continúan simpatizando con la ahora corrida, que abran los ojos, que analicen honestamente lo ocurrido, que están obligados a cerrar filas en favor del secretario general, pues bien que mal ustedes lo eligieron, y si algo le tienen que reprochar. Recuerden que ya se acercan las elecciones y no hay mejor argumento que un voto a favor o en contra.

También para recordarles que esta puede ser la última llamada, pues esa organización, que fue creada por miles de trabajadores cansados de las reelecciones de JUANA CONSUELO, soñó con formar un sindicato democrático, a los que les salió más grave el remedio que la enfermedad, pues líderes como Víctor, José Bartolomé, Antonio, Margarita y otros lo llevaron al fracaso y está a punto de desaparecer. Al tiempo.

ÚLTIMO: Víctor Novas: amigo, no temas que funcionarios de este gobierno vayan a apoyar a Margarita, también a ellos ya los tenía cansados con sus abusos, prepotencias y groserías, además los tiempos cambiaron, ahora Javier Duarte es el gobernador del estado.

Señor director, fue petición del señor Víctor Novas Hernández que su comunicado fuera publicado y usted, atento como siempre, cumplió con ello, por lo que, pido considere el presente como una respuesta a esa comunicación y de ser posible sea publicado en su prestigiado medio de comunicación.

Agradeceré a usted guardar mi anonimato hasta donde sea posible, ya que el pleito que está ocurriendo “entre las comadres” ya no es mío, pero lo fue.

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