Iglesia no rechaza a madres solteras, pero las conmina a vivir en núcleo familiar tradicional

La Iglesia Católica no rechaza a las madres solteras, pero las conmina a vivir en el seno de la familia tradicional, expresó el párroco minatitleco Uriel Yépez González.

Dijo que a pesar de que muchas mujeres de la actualidad prefieren tener a sus hijos en el modelo familiar del matriarcado, jamás suplirán la parte que le corresponde hacer a un padre en este núcleo.

Aunque dijo desconocer a ciencia cierta las declaraciones hechas por el arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios, presumió que hayan sido malinterpretadas y defendió la postura que la Iglesia tradicional ha sostenido desde su creación, en el sentido de que una verdadera familia se compone de padre, madre e hijos, "porque esto ha sido revelado en las sagradas escrituras".

El Sacerdote manifestó que tan no están en contra de las madres solteras que en la parroquia que dirige hay un grupo de ayuda para aquellas mujeres que por diversas circunstancias tienen que asumir todos los roles de un hogar: el de padre, el de la madre y el de llevar alimentos a la casa y educar a sus hijos, todo al mismo tiempo.

Pero también trabajan con las solteras, que por las tendencias de la sociedad, miedo al compromiso, al matrimonio o a la soledad pretenden procrear hijos sin la presencia de una figura paterna.

En contra de uniones gay

Del fallo emitido por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) en el que se considera discriminatorio prohibir las uniones legales entre personas del mismo sexo, dándoles la oportunidad de consumar el contrato del matrimonio, el padre Uriel insistió en que la Iglesia tiene que defender el proyecto divino, “el plan de Dios”, es decir, el de la procreación, que es algo que los homosexuales no tienen manera de hacer.

“Dios hizo hombre y mujer, es lo que cree la Iglesia, hemos defendido el matrimonio hombre y mujer, porque ahí sí hay procreación”, anotó.

Manifestó que es un tema muy delicado, pero lo más trascendental es que México necesita que se trabaje por los valores de la humanidad, “porque este fallo es algo que atenta contra la tradición y la fe, porque eso está revelado en la escritura”.

Aquí también hay un grupo que se llama Courage, que trabaja por el bien de los homosexuales para que se conviertan a la castidad, “cuando vemos que alguien está caminando por el lado equivocado, te vamos a ayudar, no te vamos a rechazar; no podemos rechazar a la persona, porque Jesucristo nunca rechazó a una persona, él está contra el pecado no contra la persona y lo mismo hace la Iglesia”.

Comparó a las lesbianas y homosexuales con los alcohólicos y drogadictos, cuando dijo que quien tiene un vicio nunca se le va a quitar, ahí lo va a tener, siempre habrá tentación, “por eso ellos trabajan con el sólo por hoy”.

Destacó que el grupo Courage local tiene como fin que las personas con estos problemas vayan haciendo conciencia que esa conducta no les va a hacer bien, es nociva, por eso se les invita a que traten de cambiar, "es un trabajo duro pero se puede".

Remató diciendo que “el Señor viene a llamar a los pecadores no a los justos, viene a curar a los enfermos y no a los sanos”, por eso los invitó a que si tienen esta inclinación se acerquen al grupo de ayuda y "trabajar en su pecado".