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Sección: Estado de Veracruz

"Fuera los Trujillo", gritaban obreros del Ingenio Central Potrero, ganó la planilla blanca

La planilla blanca siempre se sintió marginada, desplazada, hoy logró un triunfo, elección cerrada, pero inobjetable

Benito Ju?rez Ram?rez Atoyac, Ver. 23/04/2018

alcalorpolitico.com

La clase obrera del Sindicato de la sección 23 de Central Potrero, por décadas y generaciones han vivido grandes disputas, enfrentamientos entre los grupos de esquiroles, Los Cama de Piedra, "Los Caballos" y hoy Los Trujillo.

Este grupo de "Los Trujillo" lo inició en los años 90 don Modesto que se mantuvo en el poder por 15 años y heredó a su primo Luis Trujillo, que apenas tenía unos meses de haber tomado las riendas y que ayer domingo fue derrocado por 419 contra 387 votos a favor de la planilla blanca.

De esta forma, la planilla blanca, grupo que siempre se sintió marginado, desplazado, hoy logró un triunfo, elección cerrada, pero inobjetable.

Por eso, este domingo para el grupo antagónico era "hoy o nunca". Y así fue.

Llegó la hora: Desde muy temprano, cerca de las 9 de la mañana llegaron los delegados de la nacional entre ellos Néstor Rafael Delgado, con su portafolio, muy propio y se introdujeron al salón social de usos múltiples, por cierto, muy feo, sucio, todo un armatroste anticuado; al que le urge una remodelación.

Ahí, instalaron las mesas con las urnas receptoras de los votos y en cuanto todo estuvo listo, inició el proceso.

Las planillas instalaron sus módulos con una carpa con sus sillas; pero Luis, de la planilla roja, desde un principio le puso sabor a esta fiesta obrero-electoral, cantando victoria con porras, gritos y bailando; se sentían seguros de triunfar.

Llegaban los obreros simpatizantes de Luis, conocido en el ambiente obrero como “El Sapo” y le preguntaban, ¿cómo vamos? y contestaba con esa seguridad y con un guiño, ¡bien, bien!; vamos a ganar.

Mientras tanto, en el resto de las planillas –blanca, azul y amarilla–, se escuchaban puros murmullos, sentados mirando desde lejos la gente de “El Sapo”; quien tenía a su disposición un taquero; por lo que sus seguidores bebían, bailaban y comían tacos a morir.

No obstante, alrededor de las 4 de la tarde, en los alrededores, ya se dejaba escuchar la derrota de Luis Trujillo.

Los obreros que no simpatizaban con él comentaba, "¿sabes por qué va a perder “El Sapo”?, y se contestaban, por su planilla, que muchos de ellos repitieron.

Despotricaron de su tesorero, quien se hizo ya de dos camionetas de modelo reciente, casas y otras propiedades; cuando dijeron, "estaba bien pelao".

Hablaron de "El Tigre", que ya se había eternizado en el Comité y otros tantos que comentaron: "Estamos hasta la ma&¿*#$¡ de esta gente".

Y agregaron, pero esto ya se acabó, es hoy o nunca bajarlos del poder. Señalaron: "Ahora ‘El Sapo’ nos hizo a un lado y permitió que una empresa externa realizara unos trabajos de reparación cuando nosotros pudimos haberlo hecho; no se vale, y todo por llevarse su tajada".

Para las 6 de la tarde, empezaron a llegar mujeres y más obreros para ver cómo estaba la votación.

Mientras, todavía la gente de la planilla roja seguía creyendo en el triunfo de su líder Trujillo.
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Alrededor de las 7 de la tarde –lo que se había anunciados entre murmullos–, salió Ignacio Román y Camarilla con gritos "sí se pudo, sí se pudo"; celebrando el triunfo.

Sin embargo, como aún no estaba lista el acta, pidió a los reporteros que esperaran a que se dieran los resultados oficiales.

“El Sapo”, sintió que el mundo se le vino encima, no daba crédito a lo que estaba viendo; pero como buen político, trató de controlarse y aventó otra porra como no creyendo que su derrota era una realidad.

Para las 20:00 horas ya todo estaba "planchado", el virtual triunfador era Ignacio Román.

Luis Trujillo, congregó su gente y reconoció su derrota y dijo que algunos de sus seguidores lo habían traicionado.

No obstante; pidió que mantuvieran la calma, -aunque algunos con el dedo decían que no– pero al final, se retiraron con la derrota a cuestas; mientras por otro lado, la planilla blanca celebraba su triunfo; un triunfo que esperaron por muchos años.

A partir del 1 de mayo, fecha que tomará las riendas Ignacio Román, se abre una nueva página de la vida de este Sindicato de la sección 23 de Central Potrero; con la esperanza de la clase trabajadora de tener un trato mejor.