El obispo de Orizaba, Eduardo Cervantes Merino, indicó que una de las prácticas comunes en los gobiernos dictadores es culpar a los ciudadanos de lo que ocurre en el país.
“Los gobiernos dictadores echan culpas... hablo de Nerón. Entonces Nerón empieza a echar la culpa del incendio en Roma en aquella época y después vinieron otros emperadores y echaron culpas”, dijo.
Durante la celebración de los apóstoles Pedro y Pablo, a quienes les tocó dar testimonio de Cristo, señaló que lo hicieron con un carácter fuerte que fue moldeado por Dios. “El temperamento de Pedro fue ajustado para configurarse como Jesús y, sin dejar de ser como somos, debemos servir a Dios. A Pedro lo fue limando en el proceso de la fe, Jesús”, expresó.
Por ello, animó a que, aún con las fallas que pueda tener la Iglesia y con el carácter de cada fiel, se continúe dando testimonio de Dios en todos los ámbitos en los que se desarrollan.