“Perdemos la guerra”: En 75 años, educación ambiental no ha frenado daños al planeta

Al recibir el Doctorado Honoris Causa por parte de la Universidad Veracruzana (UV), el académico Pablo Ángel Meira Cartea destacó la relevancia de la educación ambiental como disciplina crítica para transformar las relaciones sociales en torno al medio ambiente y no solo como una extensión de las ciencias naturales.

Durante su mensaje, Meira señaló que la educación ambiental debe ser entendida como una disciplina híbrida situada entre los campos educativo y ambiental, con un enfoque transdisciplinario. "Su objeto no es el medio biofísico directamente, sino las relaciones sociales y simbólicas que establecemos al interactuar con el planeta", dijo.

Subrayó que esta área del conocimiento involucra dimensiones éticas, económicas, políticas y culturales, y que su efectividad no se mide solo en logros académicos, sino en la transformación social frente a problemáticas como la crisis climática y la desigualdad. Admitió que a 75 años de su consolidación, la educación ambiental no ha logrado frenar el deterioro ambiental ni revertir las desigualdades sociales. “Estamos perdiendo la guerra del reajuste humano a los límites del planeta”, advirtió.



Meira expresó su orgullo por haber desarrollado su carrera en el sistema de educación pública y resaltó el papel fundamental de las universidades públicas en la construcción de sociedades justas, frente a la amenaza del “capitalismo cognitivo” y la mercantilización del conocimiento.

También reconoció los vínculos académicos que mantiene con México y la Universidad Veracruzana, de quienes dijo ha aprendido sobre justicia ambiental y climática desde una perspectiva intercultural. Finalmente, dedicó el reconocimiento a la comunidad de educadoras y educadores ambientales que, muchas veces sin visibilidad, trabajan por un mundo más sostenible y equitativo.