“Plan B” pega en el género: quita armas para sancionar violencia política

El conjunto de reformas contenidas en el denominado “Plan B” debilita a los árbitros electorales para sancionar a las personas acusadas de violencia política en razón de género, advirtió la presidenta del Organismo Público Local Electoral (OPLE) de Veracruz, Marisol Alicia Delgadillo Morales.

Al participar en el “Diálogo y Reflexión sobre Gobernanza Democrática con Enfoque de Género y Derechos Humanos” convocado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Delgadillo Morales también advirtió que las nuevas reglas restringen la participación de las mujeres en la vida política de sus partidos.

“Ya no se van a implementar sanciones si no están previamente establecidas en la norma y va relacionada con una controversia de criterios en la que ya se ha decidido que el tema de ‘modo honesto de vivir’ no puede ser considerado un requisito para ser postulado como candidatos o candidatas”.



La reforma obliga a los Congresos de los estados a ajustar sus normas y a partir de dicha modificación, aplicar la sanción correspondiente contra los ejecutores de la violencia política en razón de género.

“Hay un llamado a los poderes legislativos para que definan el alcance de la sanción para este tipo de personas, que ya están visibilizadas como agresoras y cometen violencia de género”.

Delgadillo Morales añadió que cada uno de los partidos definirá cuál es su nivel de responsabilidad con las mujeres, militantes, afiliadas y candidatas, con respecto a las conductas de violencia contra ellas.



“Hay una gran restricción a poder generar mecanismos de sanciones a partidos políticos que no garanticen esta apertura a las mujeres”, esto a partir del concepto de la libre determinación de los partidos políticos y cuyos dirigentes ahora determinarán “qué es lo que quieren para su militancia femenina”.

“El tema que detectamos como grave son las restricciones de las facultades reglamentarias de las autoridades electorales en tema de violencia política en razón de género”, recalcó la presidenta del OPLE.

Delgadillo Morales enfatizó que la participación de las mujeres en política y en partidos es un derecho obtenido y en este no puede haber una “marcha atrás”.



“Y no es que se nos asignen puestos, o cargos, curules por hecho de ser mujer, todas y cada una a lo largo de su vida han venido preparando y profesionalizando para la toma de decisiones”.