“Queda muy poco tiempo” para hacer cambios que salven al planeta: Biólogo

Los incendios forestales sin precedentes en México, Brasil, Estados Unidos, Australia, países de la Unión Europea, China y Rusia, la invasión de langostas en África y ahora la pandemia de COVID-19, demuestran la relación tan frágil y complicada entre los humanos y el planeta, afirmó el biólogo y consultor ambiental Guillermo Montealegre Quintero.

En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, explicó que las alteraciones provocadas son evidentes con el cambio climático a nivel global, con la pérdida de los ecosistemas naturales y su biodiversidad.

La alteración de los ciclos bioquímicos de plantas y animales acuáticos y terrestres por el uso indiscriminado de sustancias químicas en la industria, en el campo y en millones de hogares, influye en la acidez de lagos, lagunas, ríos y océanos, provocando el desequilibrio de los ecosistemas y reduciendo y/o desapareciendo poblaciones enteras de organismos.



Agregó que la llegada de zargazo a las costas mexicanas del Caribe, se relaciona con la gran cantidad de sulfatos contenidos en jabones y detergentes que a diario se utilizan en millones de hogares mexicanos y que son vertidos al mar en las desembocaduras.

Estos impactos al ambiente implican también impactos en las sociedades y las economías mundiales.

Asimismo, señaló que las consecuencias de la pandemia del COVID-19 ya empiezan a impactar en la economía de todos los países del mundo y la consecuencia será que los países pobres extenderán el aprovechamiento de sus recursos naturales con tal de salir adelante y lograr pagar sus deudas con los países ricos, hipotecando el futuro de sus habitantes.



La deforestación y el aprovechamiento no controlado de los bosques, como el Pico de Orizaba, Cofre de Perote, Huayacocotla y las selvas de los Tuxtlas, han traido como consecuencia un cambio del uso del suelo y la pérdida de ecosistemas terrestres y acuáticos de gran biodiversidad.

Afirmó que, si nadie es capaz de quedarse en casa y respetar las indicaciones que dan las autoridades para proteger la vida, será muy difícil que la sociedad responda al llamado urgente de proteger el ambiente.

“Queda muy poco tiempo para lograr un cambio real en las políticas y programas para detener el deterioro mundial del planeta. Se requiere la participación de todos los países, de todas las ideologías, de todas las doctrinas religiosas, de todos los industriales, de todos los científicos, académicos, estudiantes y maestros para que este planeta sea sustentable para aquellos que aún no nacen y que también tienen derecho a un ambiente adecuado”, dijo.