¡Unidad Deportiva de Pemex, acaparada por esposas de “ingenieros”!

Los años gloriosos de la Unidad Deportiva de la colonia Petrolera han quedado convertidos sólo en un recuerdo para quienes ahí jugaron desde hace más de veinte años, en lo que era una de las mejores instalaciones del sur del estado.

Actualmente el complejo deportivo se encuentra abandonado, en la total decadencia, además de que un grupo de mujeres se ha adueñado del control de las instalaciones, atentando contra la libertad y derecho de practicar deporte de decenas de jóvenes, hijos de trabajadores petroleros.

En últimas fechas un grupo de señoras acude frecuentemente a la cancha de tenis ubicada al noreste de la unidad deportiva a practicar “el deporte blanco”, el cual aprenden rápidamente con el apoyo de un entrenador personal.

Pero mientras las damas realizan sus prácticas, vigilantes que tienen la conducta de guardaespaldas impiden que las personas se acerquen y mucho menos practiquen deporte en los alrededores.

Si alguien osa cuestionar las órdenes de estos vigilantes, rápidamente se comunican vía radio con los Agentes de Seguridad Física (también denominados “especiales”), quienes armados acuden a retirar a los deportistas.

Aunque durante los cinco años que lleva en la administración del Activo Cinco Presidentes el ingeniero Félix Alvarado Arellano la unidad deportiva ha vivido su etapa más negra, en los últimos días varias cuadrillas de trabajadores reparan el alumbrado de la cancha de tenis para la comodidad de las esposas de los ingenieros.

En un claro desvío de recursos para un beneficio de un selecto grupo de personas, pues el resto de la unidad permanece despintada, oxidada, llena de basura, enmontada, simplemente abandonada.

Y para muestra, en lo que fue un campo de futbol las porterías se cayeron debido al acumulamiento de óxido, el parque de patinaje se encuentra rodeado de monte, donde se anida fauna nociva.

La cancha de futbol rápido está invadida de monte, las telas protectoras oxidadas y las gradas simplemente son tubos viejos con tablas podridas, en otros casos los techos dejaron de existir desde hace mucho tiempo.

A pesar de esto Pemex destina una partida presupuestal para atender las áreas deportivas que le pertenecen a la empresa petrolera, dinero que simplemente no se ha invertido y del que no existen cuentas claras.

¿PEMEX DE LOS MEXICANOS?

La tarde del pasado jueves, este reportero acudió a realizar deporte a la Unidad Deportiva de la colonia Petrolera (mejor conocida como “el frontón”), rápidamente se congregó un grupo de diez personas y todos se dispusieron a jugar “una cascarita”.

Solamente habían transcurrido cinco minutos, cuando una persona que dijo ser vigilante, interrumpió el partido para ordenar que todos se retiraran, pues la esposa del administrador del Activo Cinco Presidentes, Félix Alvarado Arellano, se encontraba en el lugar y pedía que nadie estuviera cerca.

El vigilante (quien se negó a proporcionar su nombre), destacó que además que la zona donde jugábamos es considerada un área verde y que se maltrataba el pasto (el poco que queda en el lugar).

Los jugadores se arremolinaron en torno al vigilante y éste rápidamente pidió la presencia de agentes armados de Seguridad Física (especiales), llegando quince minutos después solamente uno de éstos.

Esta persona, más prepotente que el vigilante, señaló que es un área federal y que el lugar era propiedad de Pemex (según declaró Felipe Calderón, Presidente de la República, Pemex es de los Mexicanos).

Los deportistas entonces accedieron a retirarse para no maltratar el pasto, siempre y cuando fuera retirada una cuatrimoto último modelo en la que se paseaba la hija del administrador, maltratando las presuntas áreas verdes y pudiendo atropellar a alguien.

El “especial” de mala gana acudió con la señora Alvarado, quien después de un rato movió la cuatrimoto y pidió hablar con este reportero; mostrando su excelente educación y sin presentaciones previas acusó ¡prepotencia!

También destacó que los jóvenes deportistas dicen muchas groserías y eso afecta a sus hijos (señalaba todo esto mientras uno de los menores jugaba debajo de las gradas, exponiéndose a cortarse los pies con una lámina oxidada).

Por último dijo que tenía cinco años viviendo en este activo petrolero, sin saber que para desgracia de esta unidad deportiva, desde hace cinco años inició la decadencia por la falta de mantenimiento, debido a que el administrador, su esposo, Félix Alvarado Arellano, ha hecho nada por los espacios deportivos de Pemex.