16 mil insaculados se negaron a ser funcionarios de casilla, admite el IFE local

A la fecha se han registrado 162 renuncias de capacitadores y supervisores electorales, además de 16 mil 363 personas insaculadas que se negaron a participar en el proceso electoral por diversos motivos. Asimismo el número de casillas de atención especial se ha incrementado, pero el Consejo General del IFE llama a no magnificar el tema por inseguridad y a informar con responsabilidad.

Tras darse a conocer hace algunos días que existen 27 casillas de atención especial, el representante del PRI ante el Consejo General de la Junta local del IFE, Salvador Mikel Rivera, llamó a sus compañeros del órgano electoral a precisar bien por qué son de atención especial y es que no sólo se refiere a temas de inseguridad.

Dijo que ahora resulta difícil tratar de decir que no pasa nada en México o en Veracruz, pues sería un atentado al sentido común y una pérdida de credibilidad de los integrantes del órgano electoral.

En ese sentido, el presidente del Consejo General, Antonio Ignacio Manjarrez llamó a los representantes de los partidos y a los consejeros precisar ante los medios de comunicación la situación que prevalece en dichas secciones y no magnificar ante los medios.

“Ahorita tenemos 65, vamos a esperar las secciones de atención especial que apruebe el distrito 11 de Coatzacoalcos para saber el número total de secciones de atención especial y las declaraciones que hagamos precisemos a qué se refieren”, pidió el presidente.

En sesión ordinaria de este miércoles, se dio a conocer que de las más de 2 mil 210 capacitadoras y supervisores que existen para la entidad han renunciado un total de 162, de los cuales sólo cuatro son capacitadores, el resto, son supervisores electorales.

Eduardo Romay Olmos, vocal de Capacitación del IFE, aseguró que la mayoría de las renuncias fue por motivos “personales", aunque para el representante de Nueva Alianza, Emilio Cárdenas Escobosa, dio a entender que pudiera ser que es por motivos de seguridad.

Como parte del informe sobre el resultado del sorteo realizado por el Consejo General, por el que se obtuvo la letra del alfabeto con base en la cual se realizará la segunda insaculación, se dio a conocer que un total de 16 mil 363 personas insaculadas se negaron a participar por diversos motivos, pero de ese total 537 mil 900 y que representa el 3.3 por ciento, se negaron rotundamente.

Señalaron que el primero en abonar al tema de la inseguridad fue el presidente del Consejo, Antonio Ignacio Manjarrez Valle, porque fue el primero en admitir que había municipios que les preocupaban por la situación de inseguridad.

Por su parte, el representante del PRI, Salvador Mikel Rivera, expresó que una explicación al rechazo a participar como funcionarios de casilla y renuncias de capacitadores podría ser más por desidia que por temor o inseguridad.

Pidió que se especifique que las 27 casillas de atención especial ha permeado a través de los medios de comunicación como que está única y exclusivamente asociada a temas de inseguridad y no es así, sino que obedece a varios factores y uno de estos obedece a la inseguridad.

El representante priísta consideró que son pocas secciones en relación al total que son casi 5 mil secciones.

“Valdría precisar hacia el exterior por qué se clasifican de atención especial, cuáles estarían asociadas a un tema de seguridad, por antecedentes, por la razón que sea a efecto de que nosotros no vayamos a abonar con un manejo inadecuado de la información, a esta idea de que la gente no participa por temor de que le pueda pasar algo, valdría la pena precisar para evitar que vaya a contaminar”, manifestó.

El ex procurador general de Justicia del Estado, Salvador Mikel recalcó que no se trata de magnificar o minimizar el asunto, sino de actuar con sentido de responsabilidad a todos los que forman parte del Consejo General de la Junta local en Veracruz.

Recordó que existen lineamientos que especifican con base en qué se clasifican las casillas de atención especial.

“No se trata de ocultar nada, se trata de actuar con responsabilidad para que no le digamos al elector cosas que en lugar de que ayuden o abonen a una mayor participación electoral, lo que hagamos sea inhibir la participación en sus dos grandes vertientes, una, formando parte de los órganos electorales ciudadanizados y la otra, emitiendo su voto”, expresó.