3 de cada 10 mujeres veracruzanas sufren violencia en su relación: Lourdes Marcelino

Tres de cada diez mujeres mayores de 18 años han sufrido algún tipo de violencia de parte de su novio o marido y lo admiten ya sea por amor o miedo, señalan representantes de organizaciones de la defensa de la mujer.

Lourdes Marcelino González, presidente de la asociación civil “Pueblos en Desarrollo”, señaló que en comunidades de Soledad Atzompa, Ciudad Mendoza y Nogales se da este fenómeno que es resultado del machismo y los usos y costumbres de los pueblos indígenas.

Señaló que existen diferentes tipos de violencia entre los que destacan la agresión verbal, psicológica y física con las que son sometidas la mayoría de las mujeres que habitan en la zona rural e indígena, pero también en la zona urbana donde se registran graves casos de agresiones.



El concepto “amor” dijo, es un término que se ha deformado entre las parejas que aceptan ser víctimas de violencia en su relación, lo cual ha ocasionado en la última década un importante crecimiento de ésta.

Dijo que la mujer llega a confundir el sentimiento hacia su pareja como una manera de tener que aguantar maltratos y vejaciones que se convierten en violencia, sin embargo, señala que esto es solo una pérdida de los valores por parte de la mujer.

“Alguien que no se valora y que no se quiere, permite que alguien más la lastime; entonces, como se podría amar a una persona si antes no se tienen esos mismos valores y sentimientos hacia su propia persona”, señaló la presidenta de la asociación civil Pueblos en Desarrollo.



Comentó que en los talleres que se imparten en los municipios señalados, diversas asociaciones defensoras de las mujeres consideran que tres de cada diez mujeres son víctimas de la violencia, por lo cual intensificaron las acciones en municipios y colonias.

Agregó que ahora imparten talleres jurídicos y de concientización para dar a conocer las acciones a seguir en caso de ser víctimas de violencia doméstica, toda vez que la mayoría de mujeres omiten denunciar debido a que dicen amar a sus parejas, pero que solo consiguen afectar más la autoestima de la mujer y generar más violencia.