“La naturaleza del agua es estar viva, dar vida; vida que se produce sin excepción en una fase acuosa, desde las células unicelulares, los huevos de aves, peces, reptiles, hasta el vientre materno de los mamíferos como los humanos. Sin esta fase acuosa, la vida simplemente se imposibilita”.
De esta manera Rossina Guigui Alfaro, de Ritual Productora, destacó la importancia fundamental del agua, motivo por el cual a partir de este miércoles inicia en
Cauz un encuentro donde se ofrecerán proyecciones, conferencias y conversatorios, con la participación de distintas organizaciones y realizadores audiovisuales de diversos documentales que serán proyectados sobre el agua.
Los documentales que serán exhibidos son “Xnizaa, Sembradores del Agua”, de Miguel Ángel Sánchez; “Atl-Chipactli. Agua Pura”, dirigida por Luis Enrique Pérez Trujillo; y “La Montaña Mágica”, dirigida por Nicolás Durán.
Guigui Alfaro destacó que lo extraño, y sencillamente complejo de la estructura del agua, más que investigada y conocida como H2O, dos átomos de hidrogeno por uno de oxígeno, lo cual la hacen una molécula extremadamente flexible que permite ser el único elemento presente de manera natural en la tierra en estado sólido, líquido y gaseoso; con la peculiar característica que, en estado sólido, pesa menos que en su estado líquido, permitiendo la continuidad de la vida en mares, lagos y océanos que al congelarse no se hunden, de lo contrario sepultaría la vida bajo ellos. Cualquier otro elemento o compuesto diferente al agua cuando se congela, pesa más en forma sólida que liquida.
A nivel planetario el agua es el elemento más abundante y ocupa un poco más del 70% de la superficie terrestre, lo que equivale a unos 525 millones de kilómetros cúbicos de agua, funciona como el principal regulador de temperatura a nivel global y de la cual el 97% es agua salada, contenida en los mares y océanos.
Únicamente el 3% restante es agua dulce, la que disponemos para consumo y actividades productivas humanas; de ésta, el 2% está congelada en glaciares y el poco más de 1% restante está disponible para uso humano, sólo el 0.007% del agua existente en la Tierra es potable y esa cantidad se reduce año tras año por la insensata e irracional contaminación desde todos los niveles de la sociedad, siendo las más sensibles las realizadas por actividades como la minería, petroquímica, nuclear, industrial, agrícola, transgénica, tecnológica entre otras con sus respectivas aguas tóxicas residuales.
Si bien es cierto que el agua no disminuye como tal, los problemas del agua se centran tanto en su calidad, como en su cantidad–disponibilidad. Aunque no lo crea actualmente viven 1mil 600 millones de personas, con escasez absoluta de agua; 663 millones de personas sin el suministro de agua cercana, mientras que el 80% de las aguas residuales son vertidas directamente en los ecosistemas, sin ningún tipo de tratamiento previo, lo que ocasiona que más de mil 800 millones de personas en el mundo, utilicen agua contaminada para sus actividades diarias, mientras 845 mil personas mueren al año por consumo de agua no potable.
Por otro lado la escasez de agua, combinada con fenómenos del cambio climático resultan en movimientos migratorios cada vez más graves e importantes a nivel mundial, algunos de ellos a escala de conflicto geopolítico.
El sector industrial, a su vez, requiere cada vez más grandes cantidades del vital líquido en perfectas condiciones, para realizar cualquier tipo de actividad generando esquemas y modelos de violación al derecho universal de acceso al agua potable, bajo discursos dogmáticos de desarrollo económico que dan preferencia al sector productivo antes de satisfacer y dotar de agua las necesidades más básicas y elementales de poblaciones humanas y eco-sistémicas, abonando así a los conflictos sociales, económicos, ambientales, de salud y despojo del territorio principalmente al dejar en segundo plano al sustento principal universal de la vida misma: el agua. Sentenció Rossina durante la rueda de prensa.
Se ha elegido este tema, de suma urgencia a tomar en cuenta, a través del documental, conferencias y conversatorios, alternativas para informar de la situación actual en varios contextos, lugares y territorios, así como la gravedad y las soluciones a su vez, de preservación del agua.