Aunque ha habido avances significativos en materia de identificación genética, aún existen muchos restos en rezago que podrían ser analizados y entregados de forma digna a sus familias, afirmó la representante del Colectivo de Familiares de Desaparecidos Orizaba-Córdoba, Araceli Salcedo Jiménez.
En entrevista, la activista reconoció el trabajo que realiza el Centro de Identificación Humana (CIH) en Nogales, al que calificó como un esfuerzo “maravilloso” por parte del personal especializado que ahí labora. Salcedo destacó que, gracias a esa labor, algunas madres han logrado identificar y recibir dignamente los restos de sus hijos e hijas desaparecidas. “Yo no he podido encontrar a Rubí (su hija), pero hemos sido partícipes de esta lucha, de esta búsqueda y de estas entregas dignas que algunas madres ya han sido bendecidas en recibir”, compartió.
Salcedo confió en que con la reciente ampliación del CIH y los nuevos trabajos programados, se dé prioridad a los restos de larga data, es decir, aquellos que han permanecido durante años sin identificar. Dijo haber solicitado directamente al director del CIH, el maestro Ronzón, que se dé prioridad a los restos de larga data y él se comprometió a hacerlo. “No tenemos días festivos, no descansamos de buscar. Pero nos apegamos a los protocolos, a los que nosotras mismas creamos, para que no se pierda ningún tipo de evidencia y los restos puedan ser recuperados correctamente”, afirmó la representante del colectivo.
Finalmente, expresó que la identificación y entrega digna de restos no solo representa un acto de justicia, sino también una posibilidad de descanso emocional para las madres y familias que llevan años buscando a sus seres queridos, para “poder tener un poco de paz en el corazón”.