Las Mesillas es una comunidad pequeña, apenas tiene unos 400 habitantes. Reubicados hace 14 años tras las lluvias de 1999, la mayoría de los vecinos trabajan fuera de la comunidad, sin embargo mediante un proyecto de alfarería, adultos, jóvenes, niños y amas de casa, han adoptado ya un modo de vida.
Entrevistado al respecto Rodolfo Lemus Gutiérrez, subagente municipal de las Mesillas, dijo que se busca crear una cooperativa, legalmente constituida con la cual puedan producir artesanías y a la vez obtener recursos del Gobierno, de tal modo que puedan sobrevivir de esa actividad y consolidar una empresa.
Dijo que el pasado fin de semana se realizó una primera exposición de los trabajos. Así mismo dijo que la artista Silvia León Cerecedo es la encargada de capacitar a las familias por tres meses. La alfarería es un modo de trabajo que la comunidad adoptó para mejorar la calidad de vida de las personas.
El entrevistado detalla que buscarán que la Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas les otorgue recursos para el proyecto, con el que se continuarían capacitando y establecer un taller de manera definitiva, donde las personas de la comunidad puedan autoemplearse y no migren.
Finalmente detalló que esta actividad además de volver productivos a los jóvenes, coadyuva al rescate de la cultura totonaca y sus artesanías, contribuyendo al mismo tiempo a generar empleos y mejorar la economía de las familias.