Ambientalistas analizarán caso del río Atoyac, este martes en Amatlán de los Reyes

Este martes se congregarán en Amatlán de los Reyes, Veracruz, diversas organizaciones, colectivos y asociaciones civiles para tratar, entre otros temas, el de mayor preocupación para ellos: el deterioro de los recursos naturales; adelantó José Filemón Robles Rodríguez, presidente de la A.C, “Justicia y Conciencia Ciudadana”.

En esa reunión darán seguimiento al caso del Río Atoyac, que precisamente nace en Amatlán de los Reyes y cruza por ocho municipios, entre ellos Yanga, Cuitláhuac, Carrillo Puerto, Cotaxtla y Medellín, hasta llegar a la desembocadura al mar en Boca del Río.

El ambientalista, quien ha participado en diversas acciones ambientales junto con diversas organizaciones del estado de Veracruz, lamenta que las autoridades solo vayan al Río Atoyac “a tomarse la foto”, pero que realmente no han procurado una solución integral a esta problemática.



Para Robles Rodríguez es necesario que las autoridades estatales intervengan con seriedad en el caso del Río Atoyac, ya que, por ejemplo, la contaminación que padece es grave, así como su sobre explotación.

Para él, se tiene que revisar la concesión otorgada al Sistema de Riego “Alfredo B. Bonfil”, que explota más del 50 por ciento del cauce del río Atoyac para actividades agrícolas, además de abastecer al ingenio El Potrero.

Ese es uno de los objetivos de la reunión de este martes en Amatlán de los Reyes, insistir en que se analice integralmente la problemática del Río Atoyac, reiteró el presidente de la A.C, “Justicia y Conciencia Ciudadana”, pues a mediano plazo esto traerá consecuencias a otros municipios, incluidos los de Veracruz y Boca del Río.



Expuso que el caso del Río Atoyac es una llamada de alerta para todos los habitantes de Veracruz, no solo de la zona centro del Estado, pues no se está respetando al agua como lo que es: el vital líquido del que depende nuestras vidas.

No es posible, dijo, que industrias descarguen en los ríos su basura y nadie los frene. Es inconcebible que el agua cristalina que brota en Amatlán de los Reyes, a los pocos kilómetros la ensucie el ser humano con sus descargas. “Eso es lo que urge atender de manera integral, la falta de respeto al agua”, insistió por último el ambientalista.