Ataques a la iglesia por faltas graves disminuyen la fe de católicos

El sacerdote de la Iglesia de San Jerónimo en Coatepec, Quintín López Cessa, consideró que siempre ha sido difícil escuchar a Dios, pero hoy que tanto se ha atacado a la iglesia católica por fallas “serias y graves” de sus miembros, no se escucha la palabra y no hay celebración de la fe, por lo que no se alimenta al espíritu que es de donde surgen los valores.

Y es que el exvocero de la Arquidiócesis de Xalapa, dijo que son varias las causas de la violencia del ser humano, y entre éstas destacó los valores, así como las condiciones socioeconómicas, poco favorables.

“No alimentamos el espíritu y de ahí surgen los bienes y los valores, la fortaleza para vivirlos, no hay oración, en México más del 80 por ciento de la población se dice católico pero la mayoría no son practicantes, no se escucha la palabra, no hay celebración de la fe, siempre ha sido difícil escuchar a Dios, pero hoy que se ha atacado tanto a la iglesia, a veces con razón o sin razón, a veces por fallas serias y graves de miembros de la iglesia, pero a veces, en la mayor parte por la enseñanza que van contra propuestas que degradan al ser humano, serían muchas las causas”, aseveró.



En este sentido, abundó que en estos días es común escuchar el discurso de los gobiernos que se acaba la corrupción pero se sigue viviendo todos los días, así como el abuso del poder que “golpea y maltrata”.

“Si las causas son diferentes hay que atacarlas, ojalá pasemos del discurso de vamos a hacer a que se empiece a ver que se está haciendo, mientras la realidad interior del hombre no cambie va a explotar su violencia y mientras las condiciones socioeconómicas no sean favorables. Ser honestos, pacíficos, promover la dignidad”, acotó.

Refirió también que hay insatisfacción en las personas por las pocas oportunidades que existen, empleos mal remunerados, miseria y una mentalidad materialista.



“Hay pocas oportunidades para que cada persona consiga lo necesario y se genera mucha frustración, hay una violencia que va surgiendo en las personas, lo que vemos son los asaltos, secuestros y delincuencia, empezamos desde la familia hay mucha violencia, si vamos a las causas, pues vivimos en un lugar donde no hay trabajo para muchos, la gente está en la miseria no pobreza.

No hay sueldos dignos, por un lado, por otro se nos ha hecho una mentalidad materialista absoluta, una sociedad de consumo donde hay oferta de tantas cosas, se nos ha olvidado que el ser humano es mente cuerpo y espíritu”, concluyó.