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Columnas y artículos de opinión
Dice Meade: lo mejor está por venir
Helí Herrera Hernández
25 de diciembre de 2017
alcalorpolitico.com
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twitter: HELÍHERRERA.es
 
En un video difundido en las redes sociales, el precandidato del PRI, PANAL y Verde a la Presidencia de la República, José Antonio Meade, manifestó “lo mejor esta por venir en 2018”, aceptando, por lógica, que el país esta mal, y si México esta mal la primera pregunta que le haríamos es ¿Por culpa de quién esta sufrida nación se encuentra con los índices más altos de pobreza alimentaria, de empleos mal pagados, de insatisfacción en los estándares de salud, de educación de calidad, de corrupción e inseguridad?
 
Su declaración es una lápida para los partidos que hoy lo postulan porque son ellos los que llevaron a Palacio Nacional a Enrique Peña Nieto, quien ha continuado con las políticas públicas implementadas desde los gobiernos de Miguel de la Madrid, de Carlos Salinas, de Ernesto Zedillo, de Vicente Fox y el de Felipe Calderón que han colocado a México, hay que decirlo, en el límite del precipicio, del colapso financiero y social que advierten un camino sin regreso.

 
La declaración de Meade tiene dos lecturas; la primera es, en efecto, que a México lo han conducido mal todos estos gobiernos, y la segunda es: Lo mejor está por venir ¿cómo y con quién?, porque él ha formado parte de por lo menos cuatro administraciones federales, lo que lo convierte en participe, en cómplice de la crisis que vive nuestro país, mostrando ineficiencia en los cargos públicos desempeñados.
 
Entonces ¿Cómo quiere ser Presidente de México, si los resultados de las políticas públicas aplicadas por él y sus compañeros de gabinete son miseria y pobreza generalizada en más de dos tercios de la población, según datos dados a conocer por el INEGI y el propio Banco de México, que confirman el retroceso del sistema de indicadores cíclicos, que apuntan el deterioro del modelo económico que no genera crecimiento económico, sino una creciente inflación y devaluación de nuestra moneda, en niveles muy peligrosos ya.
 
No requerimos ser economistas para entender estos resultados ofrecidos por estos instrumentos de medición: el régimen político-económico está agotado y si no se cambia, el riesgo de inestabilidad social será creciente cada vez más, y está claro que el hoy candidato priísta no lo hará porque es uno de sus impulsores desde hace varios años.

 
Para que venga lo mejor para México y los mexicanos requerimos derrotar a los candidatos que no quieren derrocar al neoliberalismo, al actual régimen económico y Meade forma parte de ese grupo, afortunadamente quedará en un lejano tercer lugar el primero de julio, como usted lo comprobara a las 22 horas de ese día, porque los votantes le cobrarán factura a quien inclusive califica a los mexicanos de incultos por no saber pronunciar su apellido “se escribe Meade, pero se pronuncia Mid”.