Fue el filósofo y escritor español Unamuno, quien esculpió la frase de que “el progreso consiste en renovarse”. Luego el pueblo hizo suyo el refrán, reformado a un “renovarse o morir”

Pedro Joaquín Coldwell dejará la dirigencia nacional del PRI de la misma manera que como la asumió: Por los compromisos de tiempo y circunstancias.

Cuando vino la defenestración de Humberto Moreira Valdez, el presidente del CEN que se autoimpuso a los políticos de su formación que suponían tener mayores méritos, el aspirante a candidato presidencial Enrique Peña Nieto, se vio precisado a sacudir el tablero del ajedrez, y allí quedó acomodado, como por inercia, Pedro Joaquín, un 8 de diciembre del 2011, quien contó con el impulso del entonces líder de los senadores priistas, Manlio Fabio Beltrones Rivera.


Y Joaquín Coldwell <<ex gobernador de Quintana Roo y probada experiencia política, con 62 años de vida>>, con la excepción del exabrupto de la Ibero, ha conducido bien el timón del liderazgo priista. Y por esa razón, no pudo hacer el trapecio del senado a San Lázaro, como Manlio Fabio y Emilio Gamboa al senado. Pero, como parece apuntar, irá al gabinete <<al legal o al ampliado>> como justo reconocimiento por su ayuda para que Peña Nieto llegara a Los Pinos.

Y esto nos lleva hacia el nuevo liderazgo priista, a partir, seguramente, en diciembre.

La maquinaria electoral no reconoce estaciones, mas que de pasada. Y la presidencia del CEN no puede permanecer acéfala por largo tiempo.


Y aunque en apariencia el equipo de Peña Nieto no se ha ocupado de este asunto, lo cierto es que los pasos ya se están dando en esa dirección.

Es importante tejer y bien, la red de la transición gubernamental, pero también, en forma paralela, construir la estructura dirigente del partido que ha recuperado la presidencia de la república a golpe de votos. Por esa razón pareciera que Pedro Joaquín se quedaría en Insurgentes Norte, lo que no lo será.

Enrique Peña Nieto sabe que desde ya, una vez que tome posesión, las ruedas del futuro se echarán a andar, y no hay mucho tiempo para el reposo porque la república es México todo.


Y tiene varios brazos políticos, ahora no visibles, ante la vorágine del “gabinete de transición” en el que la mayoría quiere la fotografía, como Roberto Campa Cifrián, que es, desde ahora, un lastre para las tareas presentes del presidente electo.

Y si México es todo, esto sucederá <<el cambio en el CEN del PRI y filiales estatales>> también en todo México; cuestión de quererlo ver.

P.D. Hoy, 13 de septiembre, la gesta de los niños héroes debe convocar a la unidad de los mexicanos, hoy casi perdida por las disputas políticas de quienes no deben participar, si no honran su palabra y su firma. México no está para caprichos de depredadores..


P.D.- La dirigencia del CEN del PAN y gobernadores del mismo partido, se reunieron ayer con Enrique Peña Nieto. Buena señal para todos…

P.D.- El ex priista que fue, también gobernador y senador por Tlaxcala, por el PRD, Alfonso Sánchez Anaya, <<hoy sin cargo y quizá por eso>> volvió al columpio: se convirtió en un solitario perredista en renunciar a su militancia, luego que Andrés Manuel López Obrador anunció su separación de los partidos de izquierda para impulsar el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), al que dijo, se afiliará. Con esos ejemplares, ni a la esquina.