Con cierre de “El Buñuel”, Veracruz perdió espacio de convivencia para diversidad sexual

Prostitución, encuentros eróticos y clandestinidad prevalecieron en los denominados "cines porno", tal y como lo relata el libro "El Buñuel", de la autoría de los antropólogos Rosío Córdova Plaza y Jesús Pretelín Ricárdez, presentado en el Instituto de Investigaciones Histórico Sociales (IIHS) de la Universidad Veracruzana.

Córdova Plaza, académica del IIHS-UV e integrante de la Academia Mexicana de Ciencias, refirió que el título del libro toma nombre del cine en el puerto de Veracruz y que desde finales de la década de los noventa al 2014 sirvió de punto de encuentro de la comunidad homosexual en aquella ciudad.

Y es que tras su cierre, dijo Córdova, no hay un espacio semejante en la zona conurbada con igual propósito. Los duelos de “El Buñuel” tampoco han sabido aclarar el porqué de la clausura, o si volverá a abrir.



Córdova Plaza señaló que “El Buñuel” fue ejemplo de una época en que los denominados "cine porno" florecieron para suministrar las necesidades de convivencia de la diversidad sexual.

A la fecha, añadió, en la Ciudad de México sólo quedan seis establecimientos con tales características.

Citó de ejemplo el Cine Nacional, en que en sus mejores momentos ofreció prostitución, música en vivo, venta de artículos eróticos, aparte de la exhibición de una película para adultos.



La investigadora agregó que en el caso de el libro El Buñuel, este da continuidad a una investigación de la autora acerca de la prostitución masculina.