A quien corresponda:
Buenas noches, mi nombre es Kevin Alexis Cortés Hernández de 20 años, les escribo debido a que necesito apoyo para la difusión acerca de la situación que se le presenta a mi familia la cual es delicada y estoy intentando por todos los medios que me son posibles que se de a conocer, ya que el tiempo es crucial.
Mi abuelo José Luis Cortés Roldán de 68 años de edad, se encuentra internado desde el día 20 de mayo del presente año en la clínica 11 del IMSS en Xalapa, Veracruz, ya que sufre de diabetes y principios de cirrosis. Todo comenzó con un dolor en el pie derecho que no aguantaba, además de que comenzó a ponerse de color rojo y se observaba una mancha amarilla en la planta del pie, por lo que acudimos a su clínica correspondiente; según el diagnóstico de su visita médica era disípela, por lo que se le recetó un antibiótico y un medicamento para el dolor. A los días siguientes su salud empeoró: estuvo a punto de desmayarse, tenía la vista nublada y su pie empeoró, tornándose uno de sus dedos morado, por lo que se le llevó a urgencias y fue internado en la clínica 11, en el cual aún sigue, en el área de cirugía general, en la cama 44.
A este punto, se le trató de controlar la diabetes, ya que tenía un nivel de glucosa en la sangre de 650, y la sangre ya no era irrigada a cierta parte de su pie derecho, del cual uno de sus dedos era el peor: ya eran signos evidentes de pie diabético. El día 22 de mayo le fue amputado dicho dedo, sin embargo, la sangre sigue sin llegar bien a su pie, además de que se le limpió un poco la herida de la planta del pie, de la cual sale pus.
El día 22 se le tenía programado para pasarlo a cirugía y tratar bien está herida, es decir, drenársela bien para evitar que el problema se agrave, sin embargo, hasta la fecha no se ha realizado dicho tratamiento, ya que argumentan que no hay espacio, posponiendo siempre dicha cirugía. Esto es muy grave ya que sólo han pasado a hacerle curaciones superficiales y debido a su padecimiento el tiempo es de suma importancia, para evitar que el problema le avance a otras partes del pie o incluso la pierna, pero el trato no ha sido ni digno, ni de calidad, ni de buena manera.
Tememos por la salud de mi abuelo, por su pie e incluso su pierna, que debido a esta negligencia y atención inoportuna podría perderla
Gracias de antemano.
Kevin Alexis Cortés Hernández
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