Deuda, desocupación, informalidad, pobreza y hambre

Una vez más se contraponen dichos a hechos. La economía comprueba que discursos y declaraciones, no son igual a verdaderas inversiones. Resultados, son más que buenas intenciones. La real realidad se impone.

La población asegurada en el IMSS creció en sólo 8 mil 120, de diciembre de 2013, a abril del presente año. Disminuyendo asegurados permanentes en 3,798 e incrementándose eventuales rurales y urbanos.



Crece desocupación: de 87 mil 926, paso a 113 mil 775. En abril de 2013 la tasa fue de 2.7 % y para el mismo mes de 2014, de 3.5%.

La informalidad también aumentó, a casi 69 %, llego a 2 millones 151 mil 052. Mas 510 mil disponibles. La ocupación en el sector secundario no responde y se debilita.

La actividad de la construcción, todos coinciden, está en notorio decrecimiento. Mientras siguen pendientes las listas completas de

obras públicas o inversiones productivas, que exige la ley, como resultado del descomunal endeudamiento estatal y municipal.

Deuda pública total, cuyo monto no se fija a capricho, ni por conveniencia. Que no determinan a voluntad los presuntos responsables, que piden prestado y después no pagan; que son demandados ó requeridos a pagar conforme a derecho, porque a todos deben; que esconden informes y reciclan pasivos; que tampoco pagan cuentas institucionales y dejan que se acumulen;

que insisten en hacer creer que sólo una parte, la bancaria y de valores, es la que se debe reconocer como deuda pública total; y que antes aseguraban que la bursatilización no es deuda.

La ley y punto

A propósito. Una orientación gratuita o un atento recordatorio. Se comprueba que no se enteran de lo que son responsables, no leen o entienden las leyes que determinan qué es y qué no es deuda pública. Eso que protestaron cumplirlas y hacerlas cumplir. Un poco de lectura les haría bien, total si no es deuda que no se pague. En un Estado de Derecho, la ley y punto.



En fin, se sabe que además de sobre endeudada, la economía veracruzana cerro 2013, con crecimiento económico negativo, esto es de (-1.5 %).

Así, discurso y política oficiales de “más de lo mismo” pierden efectividad y credibilidad. El aumento de hambre y pobreza es sólo simple consecuencia.



Mover a Veracruz

México se convierte en el “del mañana”, “para dentro de unos años”, “a mediano y largo plazo”. Hechos contradicen dichos y “la economía mexicana acumula 21 meses consecutivos de caídas que oscilaron de 0.01 a 0.06 %”.(Jornada070614)



En muchas formas Estados y Municipios no pueden seguir igual, en el ilusorio universo del “no pasa nada, todo va bien y viene lo mejor”.

Para el caso de la economía veracruzana, abundan pruebas de desaceleración, estancamiento y hasta de recesión.

Una pregunta que se repite: ¿Por qué seguir con mismo discurso y mismas políticas, si se obtienen iguales o peores resultados, con inocultables y deplorables repercusiones sociales?



Mover a Veracruz ¿Por qué, cuando menos, no se replican o adaptan políticas y programas federales pertinentes, empezando por los de transparencia, acceso a la información y rendición de cuentas?

Compruébense diferencias abismales. Chéquense y compárense portales, páginas, actividades de difusión, participación social y anticorrupción. Es hora de mover a Veracruz, pero no para atrás.

Hechos y dichos



Por lo pronto, más y más pobres aparecen en las tierras del “tilingo lingo”. Antes negados, ocultados o minimizados, pero ahora oficialmente reconocidos; y, en buena parte, presupuestados, incorporados y hasta expuestos a manipulación, condicionamiento y clientelismo.

Hoy, la novedad es Veracruz de pobres, hambrientos y sedientos.

Sin considerar la importante aportación y apoyo de los casi 3 millones de dólares diarios de remesas. Tan sólo, en menos de año y medio, muchos veracruzanos han sido identificados y reclasificados como hambrientos. Ya casi la mitad de los municipios jarochos, hasta hoy 85 y los que faltan, forman parte de la promocionada cruzada sin hambre.



En tanto el programa “Oportunidades” ya llega a más de 3 millones de veracruzanos. Casi 670 mil familias, con presupuesto anual de más de 6 mil millones de pesos.

A las decenas de programas federales, se suman los estatales que lamentablemente no disponen de similar transparencia y acceso a la información. ¿Y los presupuestos, cobertura y padrones de beneficiarios estatales? ¿Y la obligada evaluación?

Lección no aprendida y hasta hoy repetida. ¿Dónde están declaraciones y discursos oficiales, estatales y municipales, de negación de la pobreza creciente, que ahora, actividades y programas federales, han puesto y ponen en su lugar? O qué, ¿mienten realidad y gobierno federal? Hechos dan la razón, a voces de alerta.



Y hay que insistir. Vemos lo que queremos ver. Ciegos, sordos y mudos ignoramos, en todo o en parte, una realidad que se repite ante nuestra insensible, limitada y enajenada percepción. Pero la culpa no es de la realidad. La responsabilidad es nuestra que, en la mayoría de los casos, ignoramos y desatendemos, deformamos y manipulamos signos, lenguajes y mensajes que muestran, de muchas formas, que el o los problemas al no atenderse no se resuelven y, más bien, se complican y crecen. Desbordándose y rebasando los conocidos y acostumbrados límites de aguante o tolerancia, hasta convertirse en inocultable reclamo público y justificada inconformidad social.

De Nayarit a Veracruz

Ineficiencia y delincuencia gubernamental siguen presentes y extienden su influencia y cultura, en muchos casos, hechas costumbre, hábito y hasta sistema.



Una tras otra, la costosa simulación de la fiscalización muestra sus verdaderos alcances y limitaciones, su encubrimiento y complicidad, factores determinantes, que también crecen hasta el cinismo. Pruebas y escándalos abundan de norte a sur y de Nayarit a Veracruz. Confiesa ex gobernante que pretende seguir en la política.

“¿… robé a la Presidencia? Si le robé, sí le robé, sí le robé. Poquito. Porque está bien pobre. Nomás una rasuradita”. (Reforma090614).

En todas partes, ejemplo jala e impunidad estimula. Las preguntas se multiplican. ¿Y la injustificada y escandalosa deuda municipal en el estado de Veracruz? ¿Qué hay de los presuntos y casi prófugos?