Ir a Menú

Ir a Contenido

Sección: Estado de Veracruz

Diócesis Orizaba pide dejar el ambiente de violencia

- “Se logra venciendo nuestro propio egoísmo y acercándonos más a Jesús y a su Palabra": Eduardo Cervantes

- Las leyes no tienen sentido si no sirven para favorecer la paz, dijo el obispo

Lissette Hernández Orizaba, Ver. 13/03/2022

alcalorpolitico.com


Click para ver fotos
Este domingo, el obispo de la Diócesis de Orizaba, Eduardo Cervantes Merino, externó que las leyes no tienen sentido si no sirven para favorecer un ambiente de armonía y de paz entre los que vivimos y compartimos un espacio.

"La ley fundamental del cristiano es el amor. Los cristianos pongamos de nuestra parte para cambiar de aspecto nuestro rostro, nuestra vida, actitudes, manera de tratar a los demás, nuestra manera de relacionarnos con Dios.

Vivimos una sociedad muy violenta, donde irte a divertir para algunos es un campo de batalla y eso es triste; y donde tendrías que estar feliz y contento, en tu casa, y disfrutando de tu vida familiar, a veces también es otro campo de batalla. La ley del amor solamente se logra venciendo nuestro propio egoísmo y acercándonos más a Jesús y a su Palabra", dijo.



Durante su homilía, Cervantes Merino destacó que en todos existe el riesgo de hacernos nuestra propia imagen de Jesús, pero buscando solo lo superficial y no lo espiritual de lo que representa.

"Los apóstoles se hicieron una imagen triunfalista del Mesías que les sirve muy bien en unos aspectos de la vida, sobre todo en el poder, como muchos que tienen las riendas de algunos gobiernos, que quieren tener el poder y el control de todo. Tristemente lo vemos ahora con las armas del otro lado del mar, pero también aquí en chiquito, en nuestro país, en nuestras familias, en donde quiera tenemos esa debilidad", lamentó.

Por ello pidió que durante esta Cuaresma se contemple a Jesús y su “obra salvadora” como lo mejor que le puede pasar a un ser humano.



"Debemos de tener buenas actitudes, no malas caras, no malos tratos, no tener descalificaciones, ni agresión. Estamos llamados a cambiar nosotros con Jesús", concluyó el obispo.