Zozobra y expectación generó un simulacro organizado por la Marina-Armada de México adentro de sus instalaciones en el Puerto de Veracruz, la mañana de este miércoles.
Y es que a la población le causó sorpresa ver helicópteros volando bajo en el centro y la entrada al recinto portuario de vehículos militares y de la Naval.
Se trató de un ejercicio hecho en coordinación con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Capitanía Regional del Puerto de Veracruz y el Comité de Protección del Puerto.
El evento fue en el Recinto Portuario, una práctica de Protección en los Niveles 1, 2 y 3, en cumplimiento a las obligaciones que decreta el Código Internacional para la Protección de los Buques y de las Instalaciones Portuarias (Código PBIP), impuesto en todo el mundo luego de los ataques del 11 de septiembre.
De acuerdo a la información que se dio, la metodología de planeación y ejecución de los ejercicios, se basó en la creación de posibles escenarios con potenciales amenazas a la protección del Puerto, tratando de garantizar la seguridad y protección en los recintos portuarios.
Los escenarios se realizaron de acuerdo a los tres niveles de protección: en el primero se simuló el choque de un vehículo de transporte de personal; en el segundo, se realizó un presunto derrame de material peligroso por colisión de un auto-tanque (pipa), finalmente el nivel tres fue simulado a través de una presunta amenaza de artefacto explosivo y el secuestro de una instalación portuaria con el objeto de extraer mercancía ilícita, en diferentes cesionarias del puerto.
Durante el simulacro, la Armada de México participó con 111 elementos de diferentes cuerpos y servicios, una unidad aeronaval, una de superficie, 14 vehículos y una ambulancia.