El 1 de julio hubo sinnúmero de irregularidades, pero nadie hizo caso por festejar a AMLO

En las elecciones del 1 de julio hubo un sinnúmero de irregularidades, pero nadie les hizo caso porque estaban festejando el triunfo de Andrés Manuel López Obrador y MORENA; sin embargo, ello es una muestra clara del sistema electoral corrompido que tiene México y en el que incluso participa el crimen organizado; comentó Mauricio Merino Huerta, investigador del Centro de Investigaciones y Docencia Económicas de la Universidad Veracruzana (UV).

Señaló que si no se hubieran obtenido los resultados que ya todos conocemos, la situación en el país actualmente sería otra e incluso los ojos del mundo estarían posados sobre México por la cantidad de situaciones de exceso y falta de transparencia.

“El sistema electoral funcionó muy bien, en buena medida gracias al resultado electoral, pero si el resultado electoral no hubiera sido el que ahora es, muy probablemente el país estaría metido en un debate de naturaleza completamente distinta; estaríamos hablando de la influencia del dinero negro, de los excesos de los partidos políticos, de los rebases en topes de gastos de campaña, falta de transparencia y ausencia de medios de control”.



Indicó el discurso hubiera tenido como eje el sesgo de los programas sociales, con el único propósito de tener más clientela, pero no para sacar a la población de lapobreza en que está inmersa.

“Estoy seguro de que ese sería el debate, sería algo muy penoso, muy angustioso; aunque no sucedió porque López Obrador ganó de manera contundente”, dijo y aseguró que el triunfo ha ocultado los vicios que imperan en el Sistema electoral, que está “profundamente corrompido” por el dinero público y la influencia de los poderes fácticos del crimen organizado.



“¿En qué medida?, no sabemos, pero no cabe duda de que han sido infiltrados por el crimen organizado. No podemos cerrar los ojos frente a estos hechos”, finalizó.