A pesar de que en el 2021 se logró la despenalización del aborto en Veracruz, organizaciones feministas advirtieron que el acceso a la Interrupción Legal del Embarazo (ILE) sigue siendo limitado, especialmente en comunidades rurales e indígenas donde la información no llega y persisten las maternidades forzadas.
Durante la presentación de la campaña “Cuatro años de un logro histórico que aún no llega a todas”, integrantes de Marea Verde Altas Montañas (MVAM) y Católicas por el Derecho a Decidir destacaron que, pese al marco legal vigente desde el mencionado año, las niñas y adolescentes más pobres continúan sin acceso efectivo a este derecho.
Destacaron que de acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, en Veracruz se registraron 621 nacimientos en niñas de 10 a 14 años, pero sólo 1.7 por ciento pudo acceder a una ILE, como lo establece la NOM-046 para casos de violencia sexual. Ante ello, mencionaron, el contexto estatal agrava el problema: Veracruz ocupa el segundo lugar nacional en pobreza y el tercero en embarazos infantiles, pero sólo existen 7 unidades de aborto seguro, una de ellas en el Hospital Civil de Río Blanco, que atiende a 57 municipios de la región de las Altas Montañas.
La campaña, resaltaron, busca difundir materiales informativos en español y náhuatl sobre la ruta de acceso a la ILE, los cuales serán colocados en clínicas rurales y espacios comunitarios, con apoyo de la Secretaría de Salud estatal. Las colectivas también planean transmitir spots radiales en la emisora XEZON, La Voz de la Sierra, para alcanzar municipios como Tequila, Soledad Atzompa, Zongolica y Mixtla de Altamirano. “Obligar a una niña a continuar con un embarazo forzado no es acompañamiento, es tortura institucionalizada”, subrayaron las voceras, “la justicia reproductiva no puede quedarse en el papel; debe llegar a todas”.