El odontólogo Alfonso Sánchez invita a los xalapeños a adoptar a uno de sus 70 perros

Durante más de 9 años, Rafael Alfonso Sánchez Casas, odontólogo de profesión, se ha dedicado a rescatar, adoptar, cuidar y proteger a perros abandonados en las calles, a los cuales ha brindado un hogar, pero sobre todo ha llenado de cariño y amor; lamentablemente hace apenas 10 días le fue diagnosticado un cáncer de colon en fase 3, al cual debe enfrentarse y por ende busca desesperadamente un hogar para estos 70 perros mestizos que califica como hijos.

“Yo lo seguiría haciendo encantado de la vida; sin embargo, ahora estoy en una situación crítica, tanto en lo físico como en lo económico y no puedo seguir cuidando a estos 70 perros que son como mis hijos, afortunadamente aún en lo anímico tengo confianza en que la sociedad xalapeña responderá al llamado y vendrán 70 buenas personas para que cada uno de mis perros encuentre un hogar y así dejar mi obra concluida”, relató.

Sánchez Casas contó que el mal que padece no le preocupa tanto, pues está preparado para enfrentar lo que el destino le tenga preparado; sin embargo, fue enfático al decir que por el momento su urgencia principal es encontrar un hogar para estos perritos que no quiere dejar en el abandono.



“Esa es mi única preocupación antes de irme de este planeta, si me tengo que ir no hay problema, yo he sido un hombre feliz, he hecho lo que amo, he sido un hombre bendecido y la única forma de retribuir lo que la vida me ha dado es rescatando animales durante estos 9 años, lo hice bien, estoy contento, estoy orgulloso, pero en este momento crítico, necesito rápidamente 70 hogares para 70 perros”, subrayó.

Mantener un refugio de esta magnitud no es una tarea sencilla, pues además de los gastos base en alimentación se necesita pagar empleados que lo apoyen en el cuidado y mantenimiento diario de estos animales y desde luego cubrir gastos veterinarios que las mascotas requieren.

“Yo calculo que se gastaban unos 60 mil pesos mensuales aproximadamente, prácticamente de mi bolsa, durante 7 años prácticamente todo lo solventaba con mi trabajo profesional, pero ahora no puedo, tengo que dedicarme a mi enfermedad; necesito dinero para tratar mi enfermedad y no puedo mantener más este albergue. Si todo sale bien, quizás más adelante regresaré a esto, pero por el momento necesito dejar acomodados a estos seres maravillosos”.



Para Sánchez Casas, estos 70 seres que aún esperan por un hogar son como sus hijos y por ende su preocupación por conseguirles un hogar es evidente: “yo conozco perfectamente a cada uno de ellos; si un perro ladra yo sé quién ladra, son mis hijos, cada uno de ellos tiene un nombre y cada uno de ellos tiene una historia muy trágica; por supuesto sé quién es cada uno de ellos, estos perros son personas no humanas, estos perros tienen cariño, tienen amor y desgraciadamente no puedo seguírselos dando, alguien tendrá que sustituirme”, apuntó.

Contó que su pronóstico de vida es reservado, por tanto, lo menos que puede hacer -dijo- es colocarlos en un hogar antes de que esto se complique aún más.

Por ello, invitó a las personas a visitar el albergue y conocer estos 70 seres encantadores capaces de brindar alegría y felicidad a sus amos, como cualquier otra mascota.



“Los perros no deben ser comprados, porque es estar enriqueciendo a esas personas que lucran con la matriz de una perrita, la gente debe acudir a adoptar; hay cientos de perros en las calles que merecen un hogar, que merecen un amo y eso es lo que estoy buscando para mis perros. Ellos van a ser felices con quien se los lleve, son compañeros de vida, son perros más sociables que un perro de raza, más inteligentes que un perro de raza y seguramente aprenderán más de un perro callejero que ha sufrido y ha padecido y ellos estarán muy agradecidos”.

Dicho albergue está ubicado en avenida Los Pinos sin número, colonia Granjas Dos Ríos y para solicitar mayor información pueden visitar el sitio de Facebook GUAUdería – Pensión Solidaria para Mascotas.

“No necesitan mayores requisitos para adoptar, únicamente que se sienten a dialogar conmigo 10 minutos y yo me daré cuenta si en realidad esa persona será un buen amo para mis perros y si le dará el amor y cariño que ellos necesitan”, concluyó.