La tranquilidad de la colonia Carranza de Boca del Río se rompió hoy, al descubrirse, en el interior de una casa, los cuerpos sin vida de todauna familia. Elpadre y presunto
responsable se colgó del barandal de las escaleras, dejando una carta póstuma.
Al sitio llegaron las autoridades judiciales de Boca del Río, agentes de la AVI y de la PIVB. Fue la suegra quien presintió la tragedia de su hija y sus nietos.
Los hechos fueron reportados en la vivienda ubicada en la calle Novedades número 14, entre Excelsior y Universal, en la colonia Venustiano Carranza del municipio de Boca del Río.
La señora Rosario Padrón Mora trató de comunicarse con su hija por teléfono y no le respondió, por lo que acudió a la casa de la familia.
Al llegar a la casa, observó que su auto y la motocicleta se encontraban en la cochera, intuyendoque algo había pasado con su hija Claudia Nayeli Hernández Padrón, de 33 años y con sus nietos, los menores
Eduardo Yaset y AlejandroRoldán Hernández de 4 y 3 años, respectivamente, quienesno asistieron a la escuela, según supo la abuela y madre.
La señora Rosario Padrón pidió la presencia de la Policía Intermunicipal, quienes de inmediato arribaron y entraron a la casa, observando en la escalera que lleva al segundo piso, una cuerda color azul de la cual colgaba un hombre:
el músicoEduardo Roldan Ramírez de 40 años de edad, quien tocaba en un bar.
Los uniformados no quisieron continuar la búsqueda y dieron parte a las autoridades judiciales.
El personal de la agencia primera investigadora de Boca del Río, a cargo de Roberto H. López Mendoza, arribó a la casa. Elfiscal entró y buscó
en las recámaras, a petición de laseñora Rosario Padrón Mora quien preguntaba por su hija y nietos.
El agente descubrió una carta póstuma de Eduardo Roldan Ramírez, argumentando que se llevaba a su familia con él para "alejarlos del mal", por lo que presintió que algo malo había pasado con la familia Roldán Hernández.
En la recámara fueron localizados los cuerpos de Claudia Nayeli, Eduardo Yaset y Alejandro quienes, al parecer, fueron asfixiados.
Los cuerpos de la mujer y los niños estaban en la cama y en la cabecera había un ramo de flores que puso el padre,a cada uno de sus hijos le colocó su juguete preferido. Aparentemente escribió la carta, suicidándose después.
«No saben lo que sufríamos y pasábamos. No juzguen. Sólo cuiden a sus seres queridos y ámenlos sobre todas las cosas, sé lo que hice. Y sólo Dios podrá perdonarme. Gracias a todos y perdónenme, si pueden, algún día. Me llevó a mi familia a donde la maldad de nadie nos siga. Perdón a todos. Atentamente Eduardo».
El personal de Servicios Periciales procedió a efectuar la diligencia de levantamiento de los cuerpos y uno a uno fueron sacados y colocados en la camioneta del Forense.
La madre de la finada sufrió una fuerte crisis a causa de
la terrible noticia y fue canalizada a un hospital por socorristas de la Cruz Roja.
Los vecinos de la cuadra no podían creer lo sucedido, pues afirmaban que la pareja era tranquila.
Ante estelamentable hecho inició la investigación ministerial 212/2011, por la muerte de esta familia.