En la UMF de Banderilla le dijeron que no había medicamento que quería y después apareció

Este es uno de tantos casos que se callan en elInstituto Mexicano del Seguro Social, hace dos meses tuve consulta en la UMF 19, en Banderilla, Veracruz, cuando mi madre y yo fuimos a la farmacia, nos dijo el encargado, como si se tratara de un kilo de azúcar, "esta no la hay, venga el viernes", regresé a la semana de la fecha en que me indicó y sin voltear siquiera a verme, después de que terminó una llamada personal en su celular, repitió, "todavía no la hay, venga el viernes".

Ya muy molesta, regresé a casa y escribí un correo de queja al Instituto Mexicano del Seguro Social, en México, del cual esta es la fecha, no he recibido respuesta, por lo cual ya más molesta, hice lo mismo con el Ejecutivo de la República, informándole las condiciones en que se encuentra esa Unidad en cuanto a abasto de medicamentos, asepsia, conservación y trato al derechohabiente, mismo que fue a parar como el anterior, A LA BASURA.



Este es el caso que a casi dos meses de mi peregrinar quejándome sin respuesta y de ver cómo los empleados de la multimencionada Unidad Médico Familiar 19, de Banderilla, en el estado de Veracruz, a unos cuantos kilómetros de donde se piensa (qué presumidos) edificar una nueva Clínica del mismo Instituto, habiendo tanta escasez en todas las clínicas y hospitales a lo largo y ancho de la República, pero eso sí, se jactan de tener todo bajo control.

No soy el único caso, habemos millones de derechohabientes con este tipo de atención y seguirá de este modo si no hablamos, si nos seguimos callando. El día 23 de julio de 2013, después de que obviamente le avisaron al Director de la UMF 19, que estaba yo en plantón, llegó y de lejos me hizo la seña que ya tenía mi medicamento, él se apersonó primero en su oficina, por lo que bien pudo tener tiempo de depositar el medicamento en el cajón de su escritorio, cuando yo entré, por lo que me dijo, desde ayer lo tenía, pero lo que pasaba es que YO NO HABÍA IDO, ¿conciben ustedes tal desfachatez?, ahora resulta que tiene uno que ir diario al Instituto a pasear y a ver si de pura casualidad, ya llegaron los caramelos que se nos antojaron.

Alguien tiene que poner un remedio y ese alguien, somos los derechohabientes, no es posible que después de un plantón, un medicamento que no había ni en Veracruz, Puerto, el único lugar donde se pueda abastecer, aparece como por arte de magia.



Yo los invito a NO quedarse callados y exigir los servicios por los cuales PAGAMOS, no nos lo dan de GRATIS, sus salarios salen de los nuestros y sirven para mantenerlos cómodamente, imagínese usted siendo Director de una UMF u Hospital, ganando bien, llegando cuando y a la hora que quiere, sí, cualquiera lo desearía. Insisto, hablen, no callen, está en sus manos NUESTRA salud y la de los nuestros, no se vale que jueguen de esa manera y digan que se van a quejar con el Sindicato para que los fomente, son vidas, no números o casos.

Atentamente

Julieta Flores Ficachi



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