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Sección: V?a Correo Electr?nico

Filmó en video a agente de Tránsito en Xalapa “mordiendo” y lo subió a YouTube

Aporta la dirección electrónica y espera que las autoridades municipales lo tomen como una prueba

13/03/2011

alcalorpolitico.com

Redacción de alcalorpolitico.com:

Nuevamente me dirijo a ustedes agradeciendo el espacio que nos brindan para expresarnos. En esta ocasión deseo compartir una vivencia que, afortunadamente, dejó una evidencia de esas que tanto piden las autoridades para actuar contra los actos de corrupción de los agentes de tránsito.

Ojalá que éste texto sea leído por la Alcaldesa, por el Director de Tránsito Municipal, por el dirigente del sindicato de los agentes de tránsito de Xalapa, en fin, por todas aquellas personas que tienen algún cargo público y que en los hechos han demostrado tener poco o nulo interés en resolver (o intentar resolver) el tan traído tema de la corrupción imperante entre la gran mayoría de los agentes de tránsito en nuestra bella Xalapa.

El pasado sábado 12 de marzo, alrededor de las 14:00 horas, caminaba sobre la avenida Revolución, entre Poeta Jesús Díaz y Melchor Ocampo, cuando llamó mi atención que un oficial había detenido al conductor de un Tsuru (sin placas ni permiso visible) y dialogaba con él junto al mencionado auto.

Conocedor de muchas de las tácticas para atraer dinero de estos servidores públicos, decidí esperar cerca y, claro, pasó lo que tenía que pasar: el agente se retiró unos metros del vehículo con la licencia del automovilista, lo esperó en la esquina de Revolución y Poeta y, unos segundos después, éste se dirigió hacia el oficial con un billete de cien pesos en la mano. Alisté mi cámara y me acerqué hacia ellos.

Intercambiaron unas palabras y entonces el conductor metió el billete debajo de las boletas de infracción (que los agentes llevan ornamentalmente), y entonces el oficial le iba a entregar su licencia cuando, ¡oh, sorpresa!, notó la cámara a menos de dos metros, por lo que decidió no soltar dicha identificación, sino que la retuvo y se dirigió con el automovilista hacia el Tsuru, donde después de intercambiar palabras (evidentemente no de arrepentimiento) se la entregó, ahora sí, y lo dejó ir.

Cuando le cuestioné sobre su actuar, primero se limitó a decir "No, no, no", haciendo ademanes con su mano, y luego de plano ya no contestó, deteniendo momentáneamente el tráfico (a pesar de que tenía luz verde) para cruzarse de acera sobre Revolución y escapar de mi lente inquisitoria.

Hasta aquí podría pasar como una denuncia más, pero si se hace un análisis más detallado surgen simpáticas preguntas que dicho servidor público debería aclarar:

1) ¿Por qué se alejó del vehículo con la licencia del conductor que había detenido, para esperarle segundos más tarde en un punto lejano? Si se comete una infracción, la sanción se aplica en ese lugar y en ese momento, no hay más.

2) Una vez que se vio descubierto, ¿por qué retuvo nuevamente la licencia y la entregó cuando ya había regresado junto al automóvil? ¿Qué tanto le decía al conductor mientras caminaban de regreso? ¿Acaso una infracción de cortesía? ¡Ja! Podría servirle de excusa si el momento de duda entre entregar o no la licencia no hubiese quedado en video, y aún así tendría todavía que salvar la pregunta número 1.

3) En Ahued venden alcancías discretas, ¿no le sería más útil que traspapelar los billetes entre las boletas de infracción?

4) Si no hizo nada indebido, ¿por qué ponerse nervioso y no contestar tranquilamente en vez de negar, callar y huir?

El video en cuestión puede ser visto en el siguiente enlace: http://www.youtube.com/watch?v=gv8g7kLRC4k; lamentablemente por la cercanía y el zoom utilizado no se aprecia cuando el billete es depositado en el talonario de las boletas de infracción, pero lo de menos sería un round con el polígrafo (a ese sí no se le puede sobornar).

En el segundo 4 se ve claramente el talonario que se menciona y se aprecia el momento en que la licencia queda entre la mano del agente y la del conductor, antes de que aquél la suelte al verse descubierto; en el segundo 10 se observa que el agente aún tiene en su poder la licencia y se da vuelta para dirigirse con el automovilista hacia el Tsuru; en el segundo 45 se observa el movimiento de los brazos que indica que por fin le entrega la licencia (porque no creo que le haya devuelto el billete a modo de cancelar la transacción). Aquí quiero apuntar la pregunta número 5: ¿podría el señor agente, por favor, indicarnos qué es lo que se metió a la bolsa de su camisa, según muestran los segundos 47 y 48 del video? Segundos a partir de los cuales se nota perfectamente el rostro del oficial, digo, por aquello de que luego dicen que no hay suficiente evidencia para señalar a uno en concreto. Finalmente, a partir del segundo 52 se aprecia su negativa, silencio y posterior huída.

Desde este espacio pido a todo lector que difunda este texto y el video entre sus conocidos, preferentemente de Xalapa o de quienes piensen viajar pronto a esta capital, para que estén enterados de quién es, con prueba fehaciente, un servidor público corrupto, deshonesto e indigno. Esperamos contar pronto con material alusivo a otros agentes, a ver si ahora sí las autoridades correspondientes toman cartas en el asunto y comienzan a actuar en serio para depurar esta corporación que tanto daño le hace a la ciudad. Somos ya muchísimos los ciudadanos que estamos hartos de este proceder de personas que se sienten omnipotentes detrás de un uniforme.

Por último, pido a las autoridades competentes (es decir, que sea de su competencia según el cargo que tengan, porque mejor no nos metemos a las capacidades) que procedan conforme lo marca la normatividad interna del Ayuntamiento en este caso concreto, y que sienten un precedente firme e inequívoco de que estas acciones serán efectivamente castigadas. La omisión también es falta, ojalá no caigan en ella.

Javier Torres ([email protected])