La región de las Altas Montañas, pero en especial Orizaba, está llena de financieras que prestan sin ninguna garantía, pero después viene la realidad cuando cobran grandes intereses e infunden terror a la gente que ya no puede pagar por los elevados montos los cuales deben pagar, refirió David González Rojas, representante estatal de la Unión Zapatista en Apoyo a Deudores.
“Prestan sin ningún problema, son créditos desde lo mínimo que son 3 mil pesos y hasta 10 mil pesos y así sucesivamente, cuyos intereses son del 20, 30 hasta 50 por ciento. Sus plazos a pagar son 3 a 6 meses, pero las personas terminan pagando en un año o más por los altos montos que se hacen en la cuenta”.
Cuando las personas deben liquidar y ya no pueden, dijo, viene la cuestión extrajudicial que es una manera de meter terror, sobre todo a la madre de familia pues a ella le ofrecen estos esquemas de préstamo.
“Son a las mujeres a quienes les ofrecen estos créditos, porque las amas de casa son quienes están al tanto sobre la economía, pero ellas son el blanco para engancharlas”.
González Rojas, apuntó que deben de ver las personas las letras pequeñas de los contratos que firman con estas financieras. Además, tienen que pedir les entreguen uno de estos para saber a qué se comprometieron.
“Cuando alguien acuda a liquidar su deuda deben entregarle su pagaré, la copia del contrato ya con finiquito, porque si no les entregan esta última, después no quieren reconocer las financieras el pago y los envían a las famosas carteras vencidas, mismas que son vendidas luego a los despachos de cobranza y entonces estos de nueva cuenta cobran cuando que ya estaba saldada la deuda”.
Finalmente, comentó que cuando la persona liquida debe de ser inmediatamente bajada, quitada, sacada del buró de crédito.