Guízar y Valencia murió sirviendo a Dios como lo hizo toda su vida

El arzobispo de Xalapa, Hipólito Reyes Larios, instó a los fieles católicos a tomar como ejemplo la actitud de San Rafael Guízar y Valencia ante las enfermedades y las dolencias que tuvo hasta el final de sus días.

Durante la homilía celebrada a temprana hora en la Catedral con motivo de los festejos en honor al santo mexicano, el prelado refirió que es necesario que todos siempre estén disponibles para ayudar y atender a hermanos y hermanas que padecen alguna enfermedad.

Destacó que San Rafael Guízar, a través de estas enfermedades, asumía la pasión y la cruz de Jesús, siempre fiel a la voluntad del Señor.



“Para expresarles con mucho cariño la infinita misericordia de Dios, la importancia de aprender a asumir la pasión y la cruz de nuestro Señor Jesucristo por medio de la oración y los sacramentos”, aseveró.

Reyes Larios también indicó que los sacerdotes deben seguir el ejemplo de San Rafael de no tener descanso y siempre trabajar por su feligresía, pues en este sentido reconoció su trayectoria y arduo trabajo.

Y es que señaló que desde su lecho de muerte continuaba trabajando para los pobres y recibiendo a los sacerdotes para darles consejos, pues no descuidaba su seminario ni su Diócesis.



“Desde su lecho de muerte continuaba haciendo beneficio a sus pobres y recibiendo a los sacerdotes para darles sus consejos y no descuidaba ni un instante su seminario y el gobierno de su Diócesis. En el último retiro espiritual que dio a sus sacerdotes en mayo de 1938, les recomendó que fundaran escuelas parroquiales”, recordó.

Finalmente, resaltó que Guízar y Valencia siempre "tenía que estar haciendo algo, estudiando en su seminario", ya que murió sirviendo a Dios como lo hizo toda su vida.