Había personajes que en INVEDERP, hoy desaparecido, pedían dinero a productores

Señor Director:

Espero publique esta opinión, que va dirigida a la ciudadanía en general, así como al señor Tomas Carrillo secretario de SEDARPA.

Soy un productor dedicado al campo desde hace más de 20 años de la zona norte del estado, siempre he trabajado con los programas gubernamentales que apoyan al campo de Veracruz, el día de ayer que asistí a las oficinas del INVERDERP, me encontré con que ya se encuentran totalmente cerradas, lo cual me causó un desconcierto y pena ya que durante años siempre apoyó a productores de toda clase, siempre dando un buen trato, y este año como en otros ingresé proyectos, y al ver que ya estaban cerradas pregunté al oficial que cuidaba el edifico qué pasaría con ellos, a lo cual me comento que todos se pasaron a SEDARPA y que de igual forma se contrató algún personal en esa dependencia.

Después de este comentario, me da pena decirlo pero es justo que la ciudadanía y SEDARPA se entere de ciertos personajes obscuros que laboraban en INVEDER, hablo del Ingeniero Graciano Blass Figueroa, mejor conocido como “Chano”, y el Doctor Raúl Méndez.

El ingeniero Chano desde hace varios años, manchaba lo formal del INVEDERP, pidiendo dinero a cambio de los proyectos que metíamos se agilizaran, escudándose en que por ser jefe de área, tenía poder suficiente para no aprobar nuestros proyectos, además que decía que tenía que pasar un diezmo a sus colaboradores para que ellos ayudaran a agilizar el proceso, uno de ellos lo conozco solo por su nombre un tal Pedro, el mismo que en sus visitas por municipios del norte de estado, pedía en reuniones dinero a productores para promover y tramitar apoyos del Instituto dentro de los programas estatales, esto seguramente a espaldas del secretario del INVEDERP, pero con el respaldo del Ingeniero Graciano.

En el caso del doctor Raúl Méndez, un odontólogo con mala reputación en el DIF, y que en varios medios ya fue criticado por su corrupción, se encontraba en la misma oficina que el ingeniero Graciano, y éste doctor lejos de estar perfilado para el campo veracruzano, se dedicaba a hacer negocios en el Instituto, en ocasiones me llegó a solicitar hasta $4000 pesos por darme información de folios, siempre escudándose en su cercana relación con el Subdirector Operativo, así como con el Secretario del Instituto, cosa que era falsa, ya que en diferentes ocasiones, tanto el Subdirector como el Secretario me atendieron sin pedir nada a cambio y dando solución total a lo solicitado. Sin embrago Raúl Méndez abusaba de sus nombres para extorsionar y amenazar para su propio beneficio, a algunos compañeros productores incluso les hizo propuestas de índole sexual, sin importar que fueran hombres.

Espero que esta clase de personas no sea contratada por SEDARPA, son vividores, en el caso del Doctor que no sabe nada del campo, y del Ingeniero que sí sabe y por lo mismo se pasa de listo.

Pido omita mis datos personales, por posibles represalias, y más porque si son contratados, entonces si ahora nunca veremos un apoyo.

Atentamente.

(Nombre)