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Sección: Estado de Veracruz

Heberto, una taquería revolucionaria y el fútbol, piezas claves en nuevo libro de Villoro

Se trata de la obra biográfica del filósofo Luis Villoro Toranzo, escrita por su hijo Juan

Ángel Camarillo Xalapa, Ver. 31/08/2023

alcalorpolitico.com


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Andanzas y añoranzas tanto en la Chiapas zapatista como en la “taquerías revolucionarias”, al lado del veracruzano Heberto Castillo, retrata “La figura del mundo”, obra biográfica del filósofo Luis Villoro Toranzo, escrita por su hijo, Juan Villoro.

El libro, disponible a la venta, se presentó la tarde de este jueves en la Sala de Videoconferencias de la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información de la Universidad Veracruzana (UV) con la participación de los escritores Hugo Chaparro (Colombia) y Raciel Martínez.

El texto analiza, de manera ligera y con el humor de Villoro, pasajes del filósofo Luis tanto en la intimidad de la familia, como fuera de ella, en el Estadio Olímpico Universitario con los cotejos de los Pumas y en donde el protagonista del libro le pedía a la hinchada auriazul respeto para el equipo visitante.



“Son nuestros invitados… qué sería de nosotros sin la presencia de los rivales, el juego de los oponentes necesita del otro” reclamaba Luis Villoro en un episodio que plasmó su hijo y que compartió a los asistentes a la USBI, en retransmisión con las cinco regiones académicas de la Universidad Veracruzana.

De visita en Xalapa, a la cual comparó con Bogotá, Villoro aprovechó para recordar un capítulo en donde su padre y el líder de izquierda, Heberto Castillo, decidieron abrir la “taquería revolucionaria” para solventar los gastos generados por el entonces Partido Mexicano de los Trabajadores (PMT).

“Ambos estuvieron en la Coalición de Maestros. Heberto fue a dar a la cárcel de Lecumberri. Mi padre estaba en la lista de los que debían ser detenidos de milagro escapó y luego salió del país. No estuvo en la cárcel, pero siempre estuvo cerca de Heberto y posteriormente decidieron crear un partido político que fuera eminentemente democrático. Un partido nacionalista en el sentido de que no aceptara las consignas ortodoxas del marxismo, sino que buscara una adaptación mexicana hacia una democracia”.



En dicho partido, todo el mundo contaría con el derecho a contradecir a los líderes en las asambleas y se decidió abrir una taquería para sufragar las causas del PMT con un menú de tacos de guisado, de tinga, de rajas, de papas con chorizo, sin embargo faltaron los tacos al pastor, los tacos al carbón y quesos fundidos.

“Y entonces Heberto le dijo, pero ‘Luis no seas dogmático. El hombre nuevo necesita otro menú. El apetito revolucionario tiene que ser diferente” argumentó el político veracruzano dentro de la anécdota de Villoro, desatando las risas de los asistentes en la Sala de Videoconferencias.